Luego de los Gran Prix de Túnez e Italia, Darwin Castro, junto a sus guías Diego Arévalo (1.500 metros) y Sebastián Rosero (5.000 metros), apenas tendrán otro evento similar en Estados Unidos, previo a su participación en los Juegos Paralímpicos de Tokio 2021.
No obstante, el atleta invidente atraviesa un buen momento, según el entrenador Julio Chuqui, quien dirigió este jueves los entrenamientos del cuencano en la pista atlética Jefferson Pérez, ubicada en Miraflores.
El estratega recordó que después de un año medio recién tuvieron la primera competencia oficial en suelo tunecino, debido a la pandemia. “Aquí se ratificó la marca para los Juegos Paralímpicos, con una marca de 4 minutos 16 segundos y 81 centésimas en 1.500 (ubicándose primero), y 15m 59s y 99c en 5.000 metros (tercero). Ambas pruebas en la categoría T11 (ceguera total)”.
“Después de tres microciclos participaron en la localidad italiana de Jesolo, en donde bajaron los tiempos: 4m, 12s y 49 centésimas (primero, a un segundo de su mejor marca personal) y 15m 52s y 25c (segundo), a pesar del corto tiempo de preparación entre competencia y competencia, reflejando así el trabajo que se viene haciendo y el compromiso de nuestros deportistas”, acotó.
Para el siguiente mes tenían planificado otro Gran Prix en París, empero, fue cancelado debido a la nueva oleada de contagios de Covid-19 en el mundo. “Ahora manejamos la opción de ir a correr el 22 y 23 de mayo en Arizona-Estados Unidos. Quizás no exista el mismo nivel debido a que varios atletas no estarán presentes por las restricciones de la pandemia, entre ellos keniatas y japoneses, quienes son rivales directos de Darwin, pero nosotros vamos porque necesitamos competir; apenas sería nuestra tercera participación internacional en lo que va del año”.
Luego de medirse en Estados Unidos, el equipo tricolor tiene previsto un Campamento, que inicialmente iba a realizarse en el Centro de Alto Rendimiento de Rio Maior-Portugal, pero no se concretó debido a que para esas fechas (julio) las instalaciones estaban ocupadas, “por lo que estamos analizando la posibilidad de desplazarnos a Estambul-Turquía para cumplir este concentrado…La idea es acercarnos lo que más podamos a Tokio para irnos adaptando al uso horario”.
De su lado, Darwin, quien este año se mantiene en la cima del ranking mundial en los 1.500 metros y cuarto en 5.000 metros, manifestó que se siente motivado tras sus últimas participaciones mundiales. “Las marcas que hemos obtenido este año sin duda nos invitan a soñar con una medalla paralímpica, sin embargo, tenemos que seguir entrenando, ya que cada día se puede mejorar”.
El deportista finalmente agradeció el apoyo brindado por sus auspiciantes. “Debo agradecer el respaldo de la empresa pública y privada: Secretaría del Deporte, Comité Paralímpico Ecuatoriano, Federación Deportiva del Azuay, Toyota del Ecuador y Electro Instalaciones”.
En Río 2016, Castro pasó a la historia del paratletismo ecuatoriano al conseguir el primero diploma paralímpico para el país, ubicándose séptimo en los 5.000 metros junto a Rosero. (D)
