Linz (Austria) (EFE).- «Huesos de aceituna ¿Desperdicio o tesoro?». Es la gran pregunta que se hace la iniciativa barcelonesa «Remix El Barrio», que produce chaquetas, jarrones o galletas para perros con la comida que sus vecinos tiran a la basura.
Las responsables de este proyecto recogieron el viernes el premio STARTS de «Colaboración Innovadora» que cada año concede la Comisión Europea dentro de Ars Electronica, el festival más importante del mundo dedicado a las conexiones entre arte, tecnología y sociedad.
«Remix el Barrio empezó hace dos años con la idea de promover la cocreación en el Poblenou y de ver como se puede implementar la economía circular», cuenta a Efe Marion Real, una de las dos coordinadoras de la iniciativa.
MATERIALES INUSUALES
Solo en Cataluña, se tiran a la basura alrededor de 720 toneladas de comida al día. Con todo este desperdicio, que asciende a las 260.000 toneladas anuales, se podrían cumplir las necesidades alimenticias de medio millón de personas en un año.
Bajo esta premisa, Remix El Barrio, impulsado por el centro de innovación Fab Lab Barcelona, decidió reutilizar nueve elementos orgánicos diferentes para demostrarle a la población todo lo que se puede hacer con lo que ellos consideran «inservible».
«Los perfiles son súper diferentes y esa es la fuerza del colectivo. Cada uno ha seguido su exploración individual y, poco a poco, ha transformado en productos sus ideas», explica Real al hablar de sus compañeros.
Entre los objetos expuestos, destaca una colección de textiles, que incluye una larga chaqueta fabricada a partir de pieles de naranja.
Las encargadas de su confección, Elisenda Jaquemot y Susana Jurado, revelan a Efe que como expertas en moda lo que más les llamaba la atención era experimentar con la sostenibilidad y no solo diseñar la prenda, sino fabricar su propio material.
«La posibilidad de poder tener una prenda de ropa hecha con este material nos encantaba», reconoce Jaquemot, que desde un primer momento estaba interesada en trabajar con piel de naranja.
Tras esta ropa, colgado de las paredes de la exhibición, puede leerse en un poster de color oscuro el eslogan «Estoy hecho con restos del Poblenou».
Este inusual cartel fue idea de Dihue Miguens, quien decidió fabricar papel a través de cáscaras de granos de café.
Miguens, que viene del mundo del diseño gráfico, relata el reto que supuso conseguir este material, juntando bioplásticos con trozos pequeños y deshidratados de fibras de café tostadas.
Junto a estos dos ejemplos, se exponen también lámparas construidas con huesos de aceituna, jabones a partir de aceites usados o aperitivos de mascota aprovechando restos de comida de restaurantes de la zona, entre otros.
ECONOMÍA CIRCULAR
Frente a la economía lineal, en la que los productos se desechan tras su consumo, el concepto de economía circular promulga un flujo constante en el que los residuos puedan reutilizarse para generar otros recursos.
En el proceso de «extracción» de las materias primas, cuenta Marion Real, se sucedieron numerosas conversaciones con restaurantes y bares de la zona para que probaran «cosas nuevas» y decidieran apostar por la sostenibilidad.
Luego, en lo que a la producción del producto final respecta, todos los autores tuvieron presente este concepto.
«Diseñamos pósteres y algunos envases para tazas de café. Todo se quedaba en el propio barrio. La cafetería tuesta y yo te hago el envoltorio para la taza. Esa idea de circularidad era muy importante para nosotros», detalla Miguens.
CONCIENCIACIÓN CIUDADANA
A pesar de publicar tutoriales en su canal de YouTube explicando en proceso de creación, el objetivo de Remix El Barrio es hacerle ver a las personas la cantidad de comida que se malgasta y las infinitas posibilidades que ofrece.
«Vamos a aumentar el colectivo de verdad y hacer proyectos para promover y difundir más las técnicas de biomateriales», anunciaba la responsable de la iniciativa.
El equipo está muy contento con el apoyo del Fab Lab Barcelona, al que consideran «muy estimulante», y confían en continuar haciendo trabajos similares al presentado en Ars Electronica, que fue premiado entre 1.564 propuestas de 96 países diferentes.
Por su parte, Susana Jurado, responsable de la creación de la chaqueta de piel de naranja y docente en la escuela de moda barcelonesa EADIMODA, mira hacía el futuro y confía en que Remix El Barrio pueda inspirar a futuras generaciones.
«Es súper importante para nosotras compartir estos conocimientos y que sean las futuras generaciones las que tomen el relevo y sigan adelante. Ya no es el futuro, es el presente y tienen que conocerlo y experimentar y a partir de ahí cambiar el mundo», concluye. EFE
