Con el fin de parar las manifestaciones que por una semana se han mantenido en el país y para frenar la llegada a Quito de Leonidas Iza, presidente de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (CONAIE), anunciada para mañana, el presidente Guillermo Lasso decretó el estado de excepción en Cotopaxi, Pichincha e Imbabura.
¿Qué implica el estado de excepción? La medida regirá por 30 días en las tres provincias en mención; en este tiempo, las Fuerzas Armadas pueden participar en el restablecimiento del orden público, en apoyo a la Policía Nacional, que podrá aplicar el uso progresivo de la fuerza.
Además, se suspende el derecho a la libertad de asociación y reunión; la inviolabilidad del domicilio y el libre tránsito; se podrán realizar requisiciones para mantener los servicios, el orden y la seguridad interna.
Los municipios, en la medida de sus atribuciones, deben garantizar el funcionamiento de los mercados y el abastecimiento de productos de primera necesidad; y el cumplimiento de las normas de tránsito (está prohibido transportar a personas en baldes de camiones y camionetas).
En cuanto a Quito, se la establece como zona de seguridad, que queda en manos de una Fuerza de Tarea Conjunta, liderada por las Fuerzas Armadas. Solo en la capital se establece el toque de queda de 22:00 a 05:00.
Pese a que, en el Decreto Ejecutivo 455, con el que se estableció el estado de excepción, se señala claramente que la suspensión del derecho a la libertad de expresión y reunión limita la conformación de aglomeraciones en espacios públicos de forma general, ayer el Gobierno promocionó la Marcha por la Paz, a realizarse en Quito, en contra de las protestas de la CONAIE.
“Esta es una marcha de paz, una iniciativa de familias que buscan regresar a sus colegios y a sus trabajos de manera presencial. En el decreto se expresa que las limitaciones son para quienes violenten los derechos del resto de ciudadanos; sean a favor o en contra, de tal manera que quienes se manifiesten pacíficamente no verán restringidos sus derechos”, se informó desde la Secretaría de Comunicación.
Sin embargo, el constitucionalista Ismael Quintana puntualizó que en el decreto no se establece ninguna excepción, por lo tanto, las reuniones en los espacios públicos están prohibidas y quien decida participar en una deberá ser detenido por incumplir la disposición de una autoridad y en delito flagrante.
“Que pena que el Gobierno promueva el incumplimiento de su propia disposición, esto es un mensaje de provocación. El sacar una contramarcha, al estilo correísta, para demostrar la fuerza en las calles, es una bajeza, que podría enfrentar a la población civil: los pacíficos contra la CONAIE”, señaló Quintana.
Al cierre de esta edición, la CONAIE, a través de su cuenta de Twitter, informó que el vehículo en el que se movilizaba Leonidas Iza fue impactado, supuestamente por un disparo de bala, en la ventana delantera, mientras estaba estacionado. “Él se encuentra bien”, puntualizó. Se esperaba un pronunciamiento de la Policía Nacional. Quito.- (ASM)- (I)
Un artículo se “borró”
En el primer documento que circuló, al cual el Gobierno calificó como un borrador, en su artículo 9 estableció restricciones a la libertad de información, a través del control de los servicios de telecomunicaciones fijas, móviles y de internet; así como con la prohibición de publicar información calificada como reservada.
Inmediatamente, las redes sociales se encendieron en contra de esta disposición y Fundamedios emitió una alerta que, según informó la organización, fue respondida por el secretario de Comunicación, Leonardo Laso, quien señaló que un error que fue eliminado en la versión final del Decreto.
Aunque efectivamente el artículo 9 no fue incluido en el Decreto publicado, quedó la duda sobre si efectivamente se trató de un borrador, pues el documento que se filtró incluía la firma del mandatario, la cual se coloca para la publicación.
