Día del indio

Edgar Pesántez Torres

Provengo de la fusión de dos etnias que me brindaron una rica identidad mestiza y por ello celebro con profundo orgullo el Día del Indio Americano. Esta fecha, que conmemora cada 12 de abril, la hermandad y la resistencia de los pueblos indígenas, significa para mí un momento de reflexión y reconocimiento de la riqueza cultural que resulta de la mezcla de raíces y tradiciones.
Al igual que el lazo que une a padre y madre en la creación de una nueva vida, el entrelazamiento de culturas y genes en mi  ser, es testimonio de la diversidad que enriquece.

El Primer Congreso Indigenista Interamericano celebrado en Pátzcuaro, Michoacán en 1940, instituyó el Día del Indio Americano, como afirmación de la historia compartida y de las luchas por los derechos de los pueblos indígenas en Hispanoamérica. Este congreso marcó un hito crucial en la búsqueda de reconocimiento y dignidad, y es un recordatorio de que cada uno llevamos consigo la herencia de esas luchas. Por lo tanto, al honrar este día, no solo celebro mi identidad mestiza, sino también el legado de resistencia, fortaleza y esperanza de las comunidades indígenas.

El objetivo principal es concienciar sobre los problemas sociales, económicos y políticos que enfrentan estas comunidades, y promover su participación activa en la construcción de políticas que favorezcan su desarrollo y bienestar. A lo largo de la historia, los pueblos indígenas de Hispanoamérica han enfrentado múltiples desafíos y adversidades desde la llegada de los colonizadores, y no solo españoles sino de otros imperios europeos y del mismo continente; no obstante, las comunidades indígenas han demostrado una resistencia admirable, preservando su identidad.

No se trata de ahondar en el resentimiento social anacrónico, ni de romper la integridad de la sociedad, como ciertos líderes de estos tiempos utilizan tácticas disruptivas, sino que este día inspire una profunda reflexión sobre la dignidad y los derechos de los pueblos indígenas. Se debe trabajar juntos y sin complejos raciales para asegurar que sus voces sean escuchadas y que sus derechos sean respetados. Esto implica elegir representantes genuinos que actúen en beneficio de sus comunidades, y no meros intérpretes de agendas externas, como deplorablemente se ha visto en los últimos años.

Se debe fomentar un diálogo abierto y respetuoso que valore el aporte cultural de toda etnia, afirmando que el intercambio y la convivencia enriquecen las sociedades. En este sentido, el reconocimiento y el respeto por el idioma, las religiones y las tradiciones de cada pueblo son pilares esenciales para construir una convivencia armónica y enriquecedora. (O)

Dr. Edgar Pesántez

Médico-Cirujano. Licenciatura en Ciencias de la Información y Comunicación Social y en Lengua y Literatura. Maestría en Educomunicación y Estudios Culturales y doctorado en Estudios Latinoamericanos.

Publicaciones relacionadas

Botón volver arriba