Novak Djokovic busca la gloria en el US Open

Novak Djokovic, uno de los tenistas más laureados de la historia, se encuentra bajo una presión inmensa de cara al US Open de 2025. Los desafíos no solo provienen de sus rivales en la cancha, sino también de una intensa situación mediática en su país natal, Serbia.
El camino hacia el último Grand Slam de la temporada se perfila como uno de los más difíciles de su carrera. Esto es especialmente considerando el ascenso de una nueva generación de tenistas.
En el ámbito deportivo, Djokovic ha tenido que lidiar con la aparición de dos jóvenes talentos. Jannik Sinner y Carlos Alcaraz, el italiano y el español respectivamente, han dominado el circuito en los últimos dos años. Ambos se han consolidado como los principales contendientes. Esto plantea un desafío físico y estratégico significativo para el veterano serbio.
Según el entrenador Rick Macci, Djokovic debe adoptar una estrategia de conservación de energía. Así, evita partidos largos y extenuantes para mantenerse en óptimas condiciones. Esta táctica se vuelve crucial, ya que el sorteo del US Open lo ha posicionado como el séptimo cabeza de serie. Esto podría llevar a un enfrentamiento con Sinner o Alcaraz tan pronto como en los cuartos de final. A pesar de haber tenido un año decente en 2025, ganando el Abierto de Ginebra y llegando a las semifinales de otros Grand Slams, Djokovic ha demostrado vulnerabilidad.
Presión para Novak Djokovic
Sin embargo, la presión para Djokovic no se limita a la cancha. Fuera de ella, enfrenta una ola de críticas de la prensa serbia. La tensión ha aumentado debido a los informes que sugieren que él y su familia están planeando mudarse a Grecia. Además, estos rumores circulan en los medios griegos e indican que la familia de Djokovic está buscando propiedades y colegios en los suburbios del norte de Atenas.
La situación se ha visto exacerbada por la decisión de Djokovic de trasladar el Abierto de Belgrado ATP 250 a Grecia, renombrándolo como Campeonato Helénico. Los medios serbios han reaccionado duramente, acusándolo de ser un «falso patriota» y poniendo en tela de juicio su lealtad al país.
La combinación de estos factores es intensa. La dura competencia de Sinner y Alcaraz y el intenso escrutinio mediático en Serbia han creado un ambiente de alta presión para Djokovic. Su desempeño en el US Open de 2025 no solo definirá su éxito en el torneo. Este será observado de cerca por un mundo del tenis que se pregunta si podrá superar los desafíos de una nueva generación y las tensiones personales que lo rodean. (D)