Debe ser traumático para el presidente Guillermo Lasso, primero palpar que uno es el país de los sueños, el que se quiere gobernar, sacarle adelante; pero que otro, totalmente diferente, es el real, en el cual más de 18 millones de ecuatorianos lo que quieren es trabajo, salud, educación, seguridad, incluso ciertas obras básicas que …








