Medidas sobre campaña

El Consejo Nacional Electoral, dio a conocer en fecha pasada una serie de medidas a ser aplicadas durante la campaña electoral, respecto al número de personas en las concentraciones públicas, de acuerdo al tamaño poblacional de cada circunscripción, y otras disposiciones a ser cumplidas por parte de cada agrupación política, esto con el objeto de prevenir en lo posible los contagios con el coronavirus que puedan suscitarse entre los participantes en actos públicos de campaña. Cabe indicar que estas medidas, cuentan con el asesoramiento de los organismos encargados de controlar la circulación y evitar las aglomeraciones.

Es inevitable que, dentro de la presente campaña electoral, que es atípica en diversos sentidos, se den concentraciones de partidarios de los candidatos, sea a las dignidades de presidente y vicepresidente de la República, o de parlamentarios. Sobre esto constan las disposiciones que permitirán evitar que el número de personas fijado en cada caso, rebase aquellos límites, y que sobre todo quienes participan en estas reuniones públicas observen el debido distanciamiento y utilicen mascarillas en todo momento. Como se ve, se trata de medidas del todo lógicas, dado el nivel de contagios que se experimenta durante las últimas semanas.

Sin embargo, la indisciplina y la falta de cumplimiento de las normas que se observa en las diversas actividades a nivel de los espacios públicos, también se advierte, por desgracia, en las actividades proselitistas con miras a la promoción electoral, ya que con contadas excepciones se observa aglomeraciones de personas que no cumplen el distanciamiento, y más aún, algunas de ellas que no llevan mascarillas y que emiten sus consignas sin el respectivo tapabocas. A más de ello, sobre todo en poblaciones pequeñas, es notoria la presencia en las calles de grupos de adherentes a diferentes agrupaciones, que, sin las medidas impuestas por el organismo electoral para la campaña, realizan labores de propaganda, poniendo en riesgo su propia seguridad y de las personas a las que se acercan. Hace falta obligar al cumplimiento estricto de las disposiciones emitidas por el CNE.