Sí, lo personal es político

Camila Corral

Del feminismo de los setenta aprendimos esa máxima que sentencia que lo que concierne a la vida de los comunes no se puede separar de lo propio, del paso de lo cotidiano por los cuerpos. Esta misma proclama me la recordó un amigo cuando compartí en Facebook un meme que se hizo viral a pocos minutos del Decreto de Estado de Excepción ejecutado por el presidente Lasso el lunes 18.

“Si tu novix cree que el estado de excepción es para combatir la delincuencia, para mí estás solterx”, rezaba la frase que los usuarios y usuarias de la red social compartieron masivamente, la mayoría como una especie de declaración de amor a sus parejas, con quienes ya hacían planes para las movilizaciones que desde ayer se concentran en las calles de todo el Ecuador.

Sí, lo personal es político, los afectos operan también a nivel social y la tecnología no es sino la extensión de las personas, sus sistemas nerviosos, implicaciones emocionales y sus campos de batalla. Y en un contexto como el ecuatoriano, la indiferencia ya no es una opción. (O)