La Empresa de Movilidad, Tránsito y Transporte (EMOV) registró ayer un mayor movimiento de vehículos que salían de Cuenca por la Panamericana Sur, y de viajeros que ingresaron a la ciudad desde Guayaquil. La Terminal Terrestre también tuvo más usuarios.
Así inicia el feriado de 3 días por la Independencia de Guayaquil, que de acuerdo con la directora de la Fundación Turismo para Cuenca, María Angélica León, constituye una prueba para el feriado de noviembre, que se espera sea el de mayor visitas del año.
Los controles se mantienen en las vías ya que, a pesar de que durante el feriado no habrá restricciones en cuanto a horarios, se toman precauciones para evitar accidentes de tránsito.
Para el Coordinador Zonal 6 de Salud, Julio Molina, esto también representa una prueba sobre el control de la pandemia, ya que en los últimos feriados se ha registrado un aumento de casos por las aglomeraciones.
Prevención
La Terminal Terrestre trabaja bajo un protocolo para prevenir contagios durante el feriado, informó el funcionario de la EMOV, Juan Carlos Tenorio.
En el edificio se han habilitado túneles de desinfección, vallas para evitar el contacto entre quienes arriban a la ciudad, medición de temperatura y automatización en los tornos de salida para que no haya interacción entre controladores y pasajeros.
El gerente de la EMOV, Fabián Moscoso, informó que la terminal funciona con un aforo limitado, ya que no todas las rutas operan con normalidad.
“Del 100 % de las frecuencias, al momento opera el 58 %, el promedio de usuarios que ingresan a la Terminal Terrestre es del 56 %”, informó.
Las cooperativas de transporte operan con menos unidades y reciben menor cantidad de pasajeros para mantener el distanciamiento social.
Rutas Orenses, por ejemplo, solo funciona con 5 de sus buses que parten en la mañana de Machala y regresan en la tarde desde Cuenca, sin contar con horarios nocturnos.
El sector turístico también guarda sus precauciones indica la directora de la Fundación Turismo.
En conjunto con la Intendencia se desarrollan operativos para verificar que bares y restaurantes cumplan con el aforo permitido, que es del 40 %, y presten medidas de bioseguridad.
También se apunta al turismo rural como una forma de disfrutar de la ciudad al aire libre y sin aglomeraciones.
Rutas gastronómicas que promueven los cuyes de Ricaurte, el pan de Nulti o la comida tradicional de San Joaquín y Sayausí, paseos a cerros como El Plateado y visitas a El Cajas se cuentan entre las opciones.
León sostiene que es indispensable el autocuidado. “Todos debemos protegernos para evitar contagios, eso garantizará que el sector turístico pueda reactivarse de cara al feriado de noviembre, lo que es positivo para la economía de la ciudad”, señaló. (JMM) (I)