El Reino Unido aspira a la normalidad este verano gracias a las vacunas

El Reino Unido espera estar cerca de la normalidad el próximo verano gracias a su rápida campaña de vacunación, lo que ha disparado el interés de los británicos por los destinos turísticos nacionales, ante el temor a que se mantengan duras restricciones para viajar al extranjero.

Más de 9 millones de británicos han recibido ya al menos una dosis de la vacuna contra el coronavirus y el Gobierno estima que un alto porcentaje de la población adulta habrá sido inmunizada en agosto, lo que ha llevado al ministro de Sanidad, Matt Hancock, a expresar sus expectativas de un «gran verano británico, libre y feliz».

El ritmo de vacunación en el resto de países europeos es por ahora más lento y existe además el temor a la importación de nuevas cepas que resten eficacia a las actuales inyecciones, por lo que el Ejecutivo ya ha advertido que no prevé levantar las barreras al movimiento internacional en un futuro cercano.

CONFIANZA EN LA INMUNIZACIÓN

Tan solo durante el pasado fin de semana el Reino Unido vacunó a cerca de 900.000 personas, y espera haber inoculado una primera dosis a los 15 millones de ciudadanos de mayor riesgo dentro de quince días.

A partir de entonces, confía en que comiencen a disminuir los casos más graves de covid-19 y mejoren las cifras de hospitalizaciones y muertes, lo que permitirá poner sobre la mesa una hoja de ruta para relajar gradualmente las restricciones.

Ante esos avances, el primer ministro, Boris Johnson, se ha declarado «optimista» de cara a las vacaciones de verano, aunque ha rehusado por ahora especificar una fecha concreta para el retorno a una relativa normalidad.

«El despliegue (del programa de vacunación) ha sido hasta ahora fenomenal, pero en términos relativos estamos todavía en el comienzo», ha subrayado el jefe de Gobierno.

TEMOR A NUEVAS VARIANTES

Uno de los principales temores del Ejecutivo es a la aparición de nuevas variantes que muestren resistencia a las actuales vacunas y puedan hacer descarrilar sus planes.

Las que más preocupan por el momento son la variante surafricana, de la que ya se han detectado 105 casos en el Reino Unido, y una variante brasileña, por lo que desde mediados de enero se ha vetado la llegada de extranjeros no residentes desde Suramérica, Suráfrica y Portugal.

Los viajeros que lleguen desde esos destinos de riesgo deberán cumplir además una cuarentena de diez días en un hotel u otra instalación indicada por el Gobierno. Tanto la oposición laborista como el Ejecutivo autónomo de Escocia, sin embargo, creen que esa medida es demasiado limitada y piden que se endurezca la cuarentena de los viajeros que lleguen desde cualquier país.

Al mismo tiempo, el Ejecutivo ha identificado la amenaza de una nueva mutación de la «variante británica» que se detectó en el sur de Inglaterra en septiembre y se ha hecho la predominante en el Reino Unido. Esa mutación, además de ser al menos tan contagiosa, puede reducir la eficacia de las vacunas, según un estudio preliminar de la Universidad de Cambridge.

«STAYCATION», VACACIONES EN CASA

Ante los obstáculos para cruzar el canal de la Mancha en busca de destinos más soleados, ha cobrado fuerza en los medios británicos el término «staycation», un juego de palabras que significa algo así como «vacaciones en casa».

Los precios de las reservas en apartamentos y hoteles en el Reino Unido se han disparado un 59 % para junio respecto al año pasado y un 38 % para agosto, según la plataforma de alquileres de corta duración Guesty.

«Con las restricciones internacionales aún presentes, nuestros datos sugieren que los británicos explorarán las vacaciones locales, especialmente en agosto», afirmó a Efe Omer Rabin, director ejecutivo de la firma.

La compañía de alquiler de casas vacacionales Awaze UK ha notado por su parte un especial incremento del interés en los destinos de playa del suroeste de Inglaterra, como Devon y Cornualles, detalló a Efe un portavoz de la compañía.

POSIBILIDADES DE VIAJES INTERNACIONALES

Con todo, los operadores subrayan que muchas de las reservas se harán en el último momento y los planes de los turistas dependerán en último término de la evolución de la pandemia.

«Es importante que el Gobierno colabore con la industria turística y elabore un plan para los futuros viajes internacionales», señaló a Efe un portavoz de la Asociación de Agentes de Viajes Británicos (ABTA, en inglés), que asegura que España sigue siendo uno de los destinos prioritarios para los británicos.

«La falta de oportunidades para viajar que hubo el año pasado ha producido una enorme demanda acumulada de vacaciones. Mucha gente está deseando reservar una escapada», agregó ese portavoz, que recalca que el 62 % de los ciudadanos del Reino Unido aún confía en poder hacer turismo en el extranjero en los próximos seis meses. EFE