Empleo y empleo

Andrés F. Ugalde Vázquez @andresugaldev

Algo puede hacer la empresa privada para detener el naufragio. Quiero decir que, en estas épocas difíciles en los que el país navega a la deriva en medio de la más atroz inseguridad que hemos conocido, el pueblo tiende a mirar hacia el Estado como la alternativa para traer un poco de orden al caos. Sin embargo, no solo el gobierno puede contribuir. La empresa privada juega, también, un rol fundamental. ¿Cómo? Pues a través de la responsabilidad social.

Y es que, frente a un gobierno desbordado en todos sus frentes, probablemente la brújula del desarrollo pase a manos de quienes, día a día, capeando la tempestad, abren las puertas de sus fábricas y negocios para mantener a la sociedad en movimiento. Y es aquí donde el concepto de la responsabilidad social se convierte en una solución. Y no, no me refiero a la ética de buscar la calidad e información correcta en los productos y servicios (que ya es bastante), sino a la necesidad de buscar precios justos que le den un respiro al pueblo, ahora que pasa por un mal momento.

Y luego, claro, está el tema del empleo más allá de la noción de que para las empresas “ya es bastante con dar empleo”, lo que no es suficiente. Porque existe empleo y empleo. Ése donde el empresario ético genera condiciones adecuadas y salarios justos; y aquel donde el empleo se precariza, donde regresamos al viejo concepto de la hacienda y el peón, en medio de los más diversos mecanismos de explotación como la firma de la renuncia anticipada el mimo día del contrato, la obligación (obligado por la necesidad) de trabajar largas horas por sueldos enanos, que expulsa a la gente del mercado laboral y les obliga a buscarse la vida en las calles y, con demasiada frecuencia, en el crimen organizado.

Entonces sí, la responsabilidad social, maravilloso concepto en el que se devuelve algo de lo que se recibe, debe ser también un parámetro que, en un futuro, nos permita una convivencia pacífica, sana y con miras a un futuro más luminoso que este duro presente en el que vivimos… (O)