Los ‘Rusos’ deleitan con su indor en el Mundialito

El buen toque de balón y la experiencia aún se mantiene en los hermanos Juan Pablo y Cristian Arévalo, conocidos como los ‘Rusos’. Ambos elementos fueron figuras en el triunfo de su equipo Perezpata, que derrotó 8-1 a Ciudadela Paraíso, en el Mundialito de los Pobres 2023.

A pesar de que su talento se ha paseado por varios años en el certamen de la pelota chica, el título en el tradicional torneo les ha sido esquivo. Han disputado fases decisivas, pero el festejo de un campeonato no ha sido posible.

De esta dupla, Juan Pablo, es el mayor con 37 años de edad. Él debutó en el Mundialito con Cristo Rey, en 2009. Jugó una final y fue elegido como el mejor elemento del torneo.

“En aquel año mi hermano se lesionó y no coincidimos ese año. No obstante, en el 2010 ya compartimos equipo y desde entonces nunca nos hemos separado. Siempre hacemos lo que nos gusta; esto se convirtió en una pasión”, comentó el experimentado indorista.

El ‘Ruso’ califica al interbarrial de indor como un capítulo más de vida. Estar en la duela del coliseo Jefferson Pérez le ayuda a desconectase de los problemas y se involucra en lo que más le gusta: patear un balón. Aún siente que pueda dar más y comenta que, no ha pensado en un su retiro. Más bien busca en esta temporada, con los colores de Perezpata, celebrar un título. Él es el capitán de este barrio. “Como reto personal quiero el primer lugar; lo he soñado”.

Juan Pablo estuvo en la sub-20 del Deportivo Cuenca. En 2004 fue ascendido al primer plantel, en aquel año el elenco rojo fue campeón. Sin embargo, no tuvo oportunidad de estar en la cancha como titular.

“Me defino como un elemento que busca divertirse. Ya no tengo la misma velocidad de antes, por ello pienso más en ayudar al equipo”.

Los logros del ‘Ruso’ mayor, son dedicados para su hijo Daniel, de siete años. Él es la inspiración del experimentado indorista.

‘Chico Ruso’

Cristian Arévalo (33 años), conocido como el ‘Chico Ruso’, se convirtió desde el 2010 en el mejor aliado en la cancha de su hermano Juan Pablo.

“Jugar juntos en un equipo nunca fue una exigencia, los dirigentes siempre nos han querido a los dos. Hemos tenido protagonismo. Estar en este certamen es un orgullo, la familia alienta desde las gradas”, contó Cristian, quien se desempeña como defensor.

El menor de esta dupla también debutó en el Mundialito con Cristo Rey. Con El Seguro y El Vecino ha disputado semifinales. Hasta el momento, no ha podido colgarse una medalla de primer lugar en el torneo interbarrial.

Su talento también pasó por el Deportivo Cuenca. En ese equipo llegó hasta la sub-20. No obstante, por falta de oportunidades dejó el sueño de jugar fútbol profesional e incursionó en el mundo de la pelota chica.

“Siempre juego en la defensa, pero aveces también le hago a la delantera (sonríe). Hemos estado cerca de un primer lugar con mi hermano, pero se nos ha escapado. Me consideran como un jugador fuerte, me gusta disputar todos los balones”, detalló Cristian Arévalo. La inspiración del menor de los ‘Rusos’ es su hijo Nicolás (6 años).