Asambleas ciudadanas: un espacio para que las parroquias de Cuenca propongan proyectos

Todas las propuestas que se realicen en las parroquias urbanas deben estar enmarcadas en el plan de desarrollo de Cuenca.

Hasta diciembre de 2023, el Municipio de Cuenca deberá tener aprobado su presupuesto para el próximo año. Este proceso es la médula espinal de lo que sostendrá la realización de obra pública en la ciudad y en el cantón.

Como antesala a la aprobación de los recursos que manejará la administración municipal, la Dirección General de Participación y Gobernabilidad organizó las Asambleas Ciudadanas, un encuentro para escuchar los requerimientos de las parroquias urbanas de Cuenca.

La idea de las asambleas es recibir las necesidades de la ciudadanía, analizarlas con los técnicos del Municipio de Cuenca y e informar si son viables. Por lo menos así se lo ha planteado la Dirección de Participación y Gobernabilidad, que ayer inició con los requerimientos de la parroquia Yanuncay.

Además de esa metodología, la dirección también se ha enfocado en ser claros con respecto a la presentación de propuestas, ya que, en años anteriores, las asambleas han sido vistas como un espacio para pedir de todo, cuando en la realidad, la realización de obras debe responder al plan de desarrollo de Cuenca.

“La planificación de presupuestos y de gestión de proyectos debe estar enfocada en el plan de desarrollo. El plan es el paraguas que cobija a toda la gestión… La propuesta tiene que ser hecha en base ya a la necesidad como parroquia, no individual o particular”, explicó a El Mercurio Mónica Vargas, directora de Participación y Gobernabilidad.

Una vez que las propuestas estén enmarcadas en el plan de desarrollo, en un segundo momento habrá un encuentro en el que representantes de las dependencias municipales las analizarán y entregarán una respuesta en una última fase.

“En un tercer momento daremos la priorización (del proyecto presentado). Pero esa priorización será algo real, en base a una factibilidad técnica, factibilidad legal, y, más que nada, en base al plan de desarrollo de la ciudad”, agregó Vargas.

Participación

En total se desarrollarán 11 asambleas en Cuenca. Ayer ya participaron representantes de la parroquia Yanuncay, mientras que hoy será el turno de la parroquia San Sebastián.

Los encuentros continuarán a las 18:00 del 16 de agosto para El Vecino, el 17 para Bellavista, el 18 para Totoracocha, el 21 para Monay, el 22 para El Batán y Sucre, el 23 para Machángara, el 24 para Hermano Miguel, el 25 para Huayna Cápac y Cañaribamba, y el 28 para San Blas, Gil Ramírez Dávalos y El Sagrario.

La necesidad de que la ciudadanía sea parte de las Asambleas es importante porque cada parroquia y sus barrios tienen diferentes requerimientos que pueden ser resueltos con la intervención del Municipio de Cuenca.

Por lo menos así lo ve el presidente del barrio 11 de Octubre, de la parroquia Yanuncay, Ronald Avecillas, quien participó en la primera asamblea.   

“Así como tenemos derechos tenemos obligaciones. Todo se puede mejorar, pero nuestra obligación como ciudadanos es ser los primeros veedores de las acciones que generen nuestros gobernantes”, dijo Avecillas a diario El Mercurio.

Debate de presupuesto

Mientras se llevan a cabo las asambleas, el Concejo Cantonal debe prepararse para debatir el presupuesto que regirá en el 2024. Se prevé que el primer debate se realice a finales de septiembre.

Hasta entonces, ya ha habido algunas solicitudes por parte de los concejales con respecto al presupuesto del próximo año.

Por ejemplo, entre lo pedido está que se mantenga el mismo formato que rige en el presupuesto de este 2023: que se baje gasto corriente y que el dinero vaya a más obras y a la inversión en seguridad.

La construcción de los retenes en Turi, la dotación de herramientas para el Consejo de Seguridad Ciudadana y una nueva convocatoria para contar con más guardias ciudadanos forman parte de los pedidos, explicó la concejala Jenny Bermeo.

A eso se suma un nuevo puente en el sector de la Universidad del Azuay y la renovación y construcción de parques, entre estos el Parque del Ferrocarril, en Gapal.

“Hemos solicitado al señor alcalde desde nuestra comisión que la obra pública se lo haga desde el primer año porque lastimosamente en las últimas administraciones la obra se ha visto al final, casi al inicio de la campaña”, dijo Bermeo.

Con las solicitudes se espera que el próximo año Cuenca empiece a ver cambios en su infraestructura a través de un presupuesto que podría oscilar entre los 227 y 230 millones de dólares. (I)