Sonido de libertad

María Eugenia Moscoso C.

Un movimiento de rescate de niños sometidos a la más cruel explotación sexual, ha constituido el tema para realizar la película Sonido de libertad, desde hace más de ocho años atrás, protagonizada por Jim Caviezel como Tim (Timoteo) Ballard, trabajo cinematográfico que aspira a ser una prevención, en esta tan dolorosa realidad, como es el tráfico de niños en el mundo y, por tanto, la batalla para salvar la integridad de esos inocentes. Tim Ballard, agente federal, renuncia a su trabajo dentro del gobierno de los Estados Unidos, en el Departamento de Seguridad Nacional, para salvar a menores de los carteles y traficantes pedófilos. Una operación policial colombiana alcanza a arrestar a muchas personas involucradas en tan lacerante realidad.

Película de gran factura, así como extremadamente dura desde el abordaje de un tema tan controversial. Este ex agente federal se enfrenta con traficantes de menores en la selva colombiana a riesgo de su vida, con el fin de salvar a más de dos centenares de niños en manos de un par de centenas de pedófilos, diseminados por todo lado y listos a que los menores sean aprovechados como carne fresca, expuestos a depravados sexuales, que incluye a una reina de belleza, lideresa en un cartel de Cartagena, a quien se la captura, tras descubrir la organización que realizaba este repudiable trabajo, en la pequeña isla de Barú. Los pequeños niños –Miguel y su hermana- convocados para ofrecerles trabajo como grandes estrellas, se les entrega a extranjeros pedófilos.

Una lamentable realidad que el mundo registra como una actividad a ser combatida por autoridades de todo orden, a fin de garantizar el futuro de esos niños expuestos a tan lacerante amenaza. (O)