Domingo único, irrepetible

Los años debieron estampar en mi vida mayor mesura y sensatez; si no lo hicieron, hoy es demasiado tarde. El mundo en el que habitamos se ha tornado violento haciendo que la sensatez emigre en busca de humanos, quizá aún con vida, en algún rincón terreno. Que el universo vive los inicios de una descomposición global de ribetes insospechados es una dolorosa verdad. Quienes vivimos ya una apreciable cantidad de años nos sentimos bien porque disfrutamos y aún lo hacemos, de las bondades de nuestro prodigioso mundo, pero, al mismo tiempo hoy somos testigos del paso acelerado con el cual nos encaminamos al inicio de un descalabro. En palabras sencillas: corremos el peligro de ser espectadores del colapso de nuestra civilización y nos encaminamos a un nuevo capítulo de historia de … ¿la humanidad?

La historia del universo registra en sus páginas episodios similares. Aquel “nihil novum sub sole” sigue siendo una verdad. La inteligencia humana, desorbitada quizá, conduce al ser humano por senderos inadecuados, suicidas.

JAMÁS OLVIDARÉ el TRECE DE ABRIL del 2025 porque:

-Ejercí mi derecho a votar, con mis propios pies, seis meses antes de cumplir mis primeros noventa años: la capacidad física de poder hacerlo agradezco a Dios; el cumplimiento de los deberes cívicos a mis profesores de la escuelita Alberto Castagnoli, de Sígsig, provincia del Azuay: así me lo enseñaron.

-Esta votación tiene un detalle, para mí, insólito y extraordinario a la vez. El TRECE DE ABRIL celebramos el Día del  Maestro ecuatoriano; la coincidencia (votación y festejo) va más allá de lo anecdótico porque mi vida siempre transcurrió entre libros, deberes y lecciones, niños y jóvenes anhelantes de conocer el mundo y de saber algo más mientras crecían sus cuerpos y domesticaban sus ímpetus.

-Este trece de abril es además DOMINGO DE RAMOS, motivación suficiente para construir un país sano.

¿COINCIDENCIAS? Obvio. Pienso que en el TSE no conozcan estas “nimiedades”. Me he permitido traerlas a colación con un solo propósito: dejar constancia de circunstancias motivantes en este evento cívico.

¿MI EXHORTACI0N?

1.Aferrémonos a la Patria que nos vio nacer y enmendemos aquello que impide el avance de la sociedad hacia la justicia y la paz.

2.Rechacemos el propósito de importar sistemas de gobierno que en otras naciones destruyeron familias, patria y honor.

3.Construyamos una sociedad donde sus habitantes defiendan la justicia, el trabajo y la fe. (O)

Dr. David Samaniego

Doctor en Filosofía y Ciencias de la Educación. Fundador de Ecomundo, Ecotec y Universidad Espíritu Santo en Guayaquil. Exprofesor del Liceo Naval y Universidad Laica (Guayaquil) y colegio Spellman (Quito).

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