Este 1 de diciembre del 2023, a las 05h30 comenzó a operar el Metro de Quito, que es el sistema de transporte más moderno que tendrá el país, la obra comenzó a construirse hace más de 12 años, tuvo un costo de USD 2.107 millones y en diciembre del 2022 ya fue inaugurada por el exalcalde Santiago Guarderas, aunque no arrancó su operación comercial.
Ayer las autoridades, con el alcalde Pabel Muñoz a la cabeza, dieron detalles de cómo operará el servicio, que contará con 15 estaciones, que inician en Quitumbe, al sur de la ciudad, y terminan en El Labrador, al norte.
Las 15 estaciones son: Quitumbe, Morán Valverde, Solanda, Cardenal de la Torre, Recreo, Magdalena, San Francisco, Alameda, El Ejido, Universidad Central, Pradera, Carolina, Iñaquito, Jipijapa, El Labrador; 5 son multimodales, es decir que incluyen conexión con otros sistemas de transporte.
El sistema cuenta con 18 trenes, 16 operarán diariamente, 2 adicionales cumplirán funciones de respaldo o en mantenimiento; cada aparato cuenta con una capacidad para transportar 1.230 personas (6 personas por metro cuadrado)
El Metro de Quito funcionará todos los días en los siguientes horarios: lunes a viernes de 5h30 a 23h00 (total 17 ½ diarias); sábados de 7h00 a 23h00 (total 16 horas); y domingos y feriados de 7h00 a 22h00 (total 15 horas).
Ahorro de tiempo
La principal novedad del Metro de Quito es el ahorro de tiempo en el traslado de los capitalinos, ayer Pabel Muñoz explicó que al usuario le llevará 34 minutos recorrer los 22 kilómetros que tiene el servicio, la misma distancia, en otro tipo de transporte involucra al menos dos horas de traslado.
“La mayoría de ciudades europeas están avanzando a la ciudad de los 15 minutos, nosotros sufrimos una ciudad de las dos horas, para llegar al puesto de trabajo, el dejar a nuestros hijos a la escuela, eso significa menos tiempo con los nuestros y eso lo tenemos que cambiar”, afirmó Muñoz.
Mayor seguridad
Germán Luzuriaga, de la Policía Nacional, explicó que el Metro de Quito contará con un tipo de seguridad especial, que se llamará Policía Metro, que dispondrá de 257 policías distribuidos a lo largo de las 15 paradas y las cinco estaciones intermodales.
“Vamos a brindar seguridad durante toda la jornada, dentro y fuera de las estaciones; además crearemos los corredores seguros, para precautelar la seguridad de las personas, que se aplicarán en zonas sensibles, por ejemplo en las universidades, desde las que les llevaremos a los estudiantes hasta las paradas del Metro”, afirmó Luzuriaga.
Un gasto innecesario
El proyecto del Metro de Quito le costó a la ciudad e incluso al país USD 2.107 millones, adicionalmente, se le cancelará a la operadora USD 216 millones por un contrato hasta noviembre del 2028.
Este gasto, para Roque Sevilla, exalcalde de la ciudad, fue innecesario, pues él había presentado un proyecto que garantizaba el mismo tiempo de traslado para el usuario, con una inversión de USD 158 millones, que implicaba la repotenciación del Trole, el cual, incluso llegaría a Calderón, que es la población de mayor crecimiento en el norte de Quito, se estima que alberga a 250 mil personas; y en el sur limitaría con el cantón Mejía.
“Con el Metro se comprometió las finanzas públicas del Municipio innecesariamente, se sacrificaron otras obras a cambio de una obra que va a seguir significando un gasto para la ciudad, con muy poco beneficio y uso, pues los 45 centavos del pasaje no cubren la operación, ya que es una tarifa antitécnica, se la tomó políticamente, pues el costo real era de 1 dólar”, afirmó el exalcalde.
Sin interconexión
Guillermo Abad, exsecretario de Movilidad del Municipio de Quito, concuerda que parte del posible fracaso del Metro se deberá a la tarifa, que no cubre los costos de operación, pero además está la cantidad de usuarios, se necesitan que al menos lo usen diariamente 450 mil personas, lo cual no será posible mientras no se creen las interconexiones y se cambie de ruta al transporte actual, que se está sobreponiendo al Metro.
“El proceso de cambio de rutas y frecuencias ni siquiera a iniciado, tampoco la interconexión con el transporte municipal (trole, ecovía y metrovía), sin este cambio, difícilmente se conseguirá la cantidad de usuarios que se necesitan para que el Metro se sostenga económicamente”, anticipó Abad.
Razón de la demora
El sistema no había sido inaugurado pese a que la obra estaba concluida desde abril del 2021, así lo dejó claro el entonces alcalde Jorge Yunda, quien en esa fecha anunció la finalización de la construcción, pero, la falta de un operador le impidió arrancar el proyecto.
Posteriormente, en diciembre del 2022, Santiago Guarderas, quien asumió la alcaldía en lugar de Yunda, inauguró el servicio, a cargo de la operadora Transdev y Metro de Medellín, lo hizo con un plan piloto que funcionaría hasta marzo del 2023, como un mecanismo de adaptación de los usuarios al nuevo servicio.
Sin embargo, solo cuando Pabel Muñoz asumió como alcalde de la capital se conoció que el contrato entre la operadora y el Municipio, para el inicio de la operación comercial de El Metro, iniciaba en mayo del 2023, por lo que el servicio se cerró nuevamente al público.