Se aplica tratamiento a pacientes con parálisis cerebral en Cuenca

El tratamiento se llevó a cabo en el Hospital Vicente Corral Moscoso (HVCM) y el Centro Especializado en Rehabilitación Integral. Cortesía

Un total de 36 niños con parálisis cerebral recibieron tratamiento con inyecciones de toxina botulínica en Cuenca.

Este procedimiento para enfermedades neurológicas permite disminuir la espasticidad, es decir, músculos tensos y rígidos en los menores.

Así como mejorar el proceso de rehabilitación, disminuir o evitar secuelas ortopédicas propias de la parálisis cerebral, como las deformidades que pueden comenzar en piernas y terminar en la columna.

El tratamiento se llevó a cabo en el Hospital Vicente Corral Moscoso (HVCM) y el Centro Especializado en Rehabilitación Integral (CERI) N° 5 de Cuenca, que desarrollaron una jornada de tres días para la aplicación de toxina botulínica.

Así lo informó el HVCM en un comunicado.

La inversión es de aproximadamente 1.000 dólares por cada paciente y depende de la complementación del tratamiento.

Aplicación

Juan Pablo Aguilera, administrador técnico del CERI, explicó que para desarrollar el tratamiento se selecciona al paciente y se determina cuáles son los músculos que necesitan infiltrar la toxina.

“Se aplica en grupos musculares de extremidades inferiores y superiores, del tórax, en parótidas, el cuello, dependiendo de la necesidad del paciente”, indicó.

El Hospital apoya al CERI con el quirófano y el servicio de neurología pediátrica para formar el equipo multidisciplinario.

Evaluación

Luego de 15 días de la infiltración de la medicación se hace una evaluación a todos los pacientes.

Esto se complementa con la elaboración y colocación de aditamentos ortopédicos y la terapia física en el CERI.

María G. madre de uno de los pacientes, señaló que es la segunda ocasión que le aplican la toxina a su hijo, a quien le diagosticaron parálisis cerebral desde hace cuatro años.

“Mi hijo recibe toda la ayuda gratuita con tratamientos y terapias que le ayudan a la movilidad del brazo izquierdo”, expresó.

Esta jornada se ejecuta dos veces al año.

Los pacientes beneficiarios de esta última tienen entre dos a 14 años de edad y pertenecen a las provincias de Azuay, Cañar y Morona Santiago. (I)

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