
La Corte Constitucional (CC) emitió dictamen favorable sobre el decreto-ley que presentó Guillermo Lasso, el 18 de agosto, para crear un impuesto redimible a las botellas plásticas no retornables para todas aquellas sociedades y personas naturales que importen, produzcan o las comercialicen en Ecuador.
Aunque el impuesto no es nuevo, ya que este formaba parte de la Ley de Fomento Ambiental que empezó a aplicarse desde noviembre de 2011, en enero de 2022, la CC declaró a esa ley como inconstitucional, por lo que el tributo a las botellas plásticas solo se iba cobrar hasta diciembre de este año.
La decisión, en aquel entonces, provocó un malestar general entre los recicladores del país, quienes son los principales beneficiarios del impuesto, cuyo valor es de hasta dos centavos por cada botella.
Ese mismo valor, que lo recauda el Servicio de Rentas Internas (SRI), se lo devuelve en su totalidad a quien recolecte, entregue y retorne las botellas plásticas.
Pero con la declaración inconstitucional de la CC hace más de un año y medio, los recicladores temían dejar de recibir un impuesto con el que, en el 2022, el Estado recaudó 39,67 millones de dólares.
Ahora, con el dictamen favorable de la Corte Constitucional, el cobro del impuesto se mantendrá una vez que el presidente Lasso emita el decreto y lo publique en el Registro Oficial.
Reacciones
Tras conocerse la constitucionalidad de la creación del impuesto, los recicladores reaccionaron de manera favorable porque el cobro de esos dos centavos a quienes producen, importan o comercializan botellas plásticas representa un ingreso económico para las familias que se dedican día a día a reciclar en las calles.
Al menos así lo ve la Asociación de Recicladores Urbanos de Cuenca (ARUC), que cada semana tiene entre 300 y 400 kilos de botellas plásticas en sus instalaciones ubicadas en el Parque Industrial.
“Estamos contentos que se reconozcan estos dos centavos porque vivimos de esto. La botella bajó totalmente de precio. Por kilo nos pagaban sesenta, setenta centavos, ahora cuesta veinte o treinta centavos el kilo. Bajó totalmente”, dijo Rosa Uyaguari, presidenta de ARUC.
Para otros, el nuevo impuesto todavía les genera dudas y confusiones, como Miguel Domínguez, un reciclador autónomo que, una vez que recoge las botellas plásticas, las vende a las grandes recicladoras.
Y precisamente eso es lo que se pregunta don Miguel: si el ser autónomo le permitirá acceder al beneficio de los dos centavos que continuarán cobrándose desde el próximo año.
De acuerdo al proyecto decreto-ley que presentó Lasso a la Corte Constitucional, los dos centavos se entregarán únicamente a los considerados “reciclador transformador”, una certificación que emitirá el rector de la producción y el rector en materia ambiental del Ecuador.
No obstante, los requisitos de esa certificación deberán ser ampliadas en un reglamento para la aplicación del cobro y devolución del dinero.
Hasta entonces se continuará aplicando el proceso de devolución del Impuesto Redimible a las Botellas Plásticas que consta en la plataforma web del SRI: https://www.sri.gob.ec/devolucion-impuesto-redimible-a-las-botellas-plasticas. (I)