La nueva variante de la viruela del mono, por la que la OMS declaró la emergencia, no se ha detectado todavía a Ecuador.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró el 14 de agosto pasado la emergencia sanitaria internacional por la presencia en África de 500 casos de la enfermedad Mpox, conocida como viruela del mono o símica, lo cual levantó las alertas en todos los países, incluido Ecuador.
A través de redes sociales se ha difundo mucha información relacionada con el tema, en la que se da a conocer sobre supuestos casos en el país, pero lo cierto es que esta enfermedad está en Ecuador desde mayo del 2022, cuando el Ministerio de Salud declaró la alerta epidemiológica ante el aumento de personas infectadas; entre el 2022 y 2023 se detectaron más de 700 casos.
Sin embargo, todos los casos que hasta ahora se han detectado en Ecuador corresponden a la cepa Monkeypox Clado II (anterior) y no a la nueva variante de la viruela del mono (Mpox Clado lb), que causó la emergencia mundial.
Antonio Naranjo, ministro de Salud, explicó que de los siete casos de esta enfermedad que se han detectado en lo que va del 2024, cuatro fueron diagnosticados entre enero y abril; mientras que tres son actuales; ninguno tiene la cepa Mpox Clado lb.
Adicionalmente, en redes sociales se difundió un contagio masivo de viruela del mono en un colegio de la provincia de Los Ríos; con imágenes se informó que varios estudiantes estarían contagiados.
El ministro señaló que de este caso existen tres jóvenes cuya situación de salud se encuentra en análisis, hasta no concluir los estudios no se puede determinar si tienen viruela símica y qué tipo de variante poseen.
Alertan sobre medidas de cuidado
En un documento que circuló en algunas las instituciones públicas, cuya autenticidad fue ratificada por el Ministerio de Salud, se establecieron medidas preventivas para evitar el contagio de la viruela del mono, como la exigencia de uso obligatorio de mascarilla para las regiones Costa y Amazonía y de forma parcial para la Sierra, solo en caso de presentar síntomas respiratorios y cutáneos.
Además, se recomienda la higiene constante de manos, evitar el consumo de alimentos en áreas cerradas, evitar aglomeraciones y el contacto físico (saludos de mano y besos) con el personal y los usuarios.
Para Pablo Espinosa, epidemiólogo de la Universidad Internacional, la exigencia del uso masivo y obligatorio de la mascarilla, por ahora, es excesiva y difícilmente se cumplirá, pues solo se la debe imponer en los lugares donde se han detectado focos de infección, caso contrario, se está creando un alarmismo exagerado.
Tampoco sería recomendable, según el experto, que se apliquen medidas de aislamiento social; lo que en cambio sí es necesario es el constante aseo de manos, lo cual debería haberse establecido como costumbre después de la pandemia de la COVID -19, porque además libra a las personas de una serie de enfermedades.
El uso de las vacunas contra la viruela del mono
En el Ministerio de Salud se ha recalcado que el país se encuentra en el proceso de adquisición de las vacunas contra la viruela del mono, las cuales estarán destinadas para inmunizar de forma exclusiva a los grupos vulnerables (personas inmunodeprimidas), adultos mayores y el personal de la salud.
Rodrigo Tenorio, presidente de la Federación Médica Ecuatoriana, señaló que las vacunas que el país pueda obtener serán pocas, pues existe escasez a nivel mundial, a esto se debe sumar el hecho de que la vacunación no proporciona una inmunidad total, por lo que los cuidados con los grupos vulnerables deben mantenerse.
Ecuador se debe preparar
Pese a que los expertos coinciden en que, por ahora no es necesario tomar cuidados extremos, sí consideran que a nivel gubernamental el país debe estar preparado para la llegada de una pandemia de la viruela del mono, con el fin de evitar que se repita el caos que se produjo con los primeros contagios de COVID – 19.
“El Gobierno debe activar la vigilancia epidemiológica efectiva, eficaz y eficiente, destinada a detectar cualquier alerta; ya se deberían tener elegidos los hospitales centinela, contar con los reactivos para las pruebas, dotar al personal de elementos de cuidado; esta vez tenemos que estar preparados”, advirtió Rodrigo Tenorio.
Medidas ciudadanas
Tomando en cuenta que la viruela del mono se transmite a través del contacto físico con la persona infectada, para el epidemiólogo Pablo Espinosa es imprescindible que los ciudadanos conozcan que: no deben tocar las pústulas que se les forman a los contagiados, ni tampoco los objetos de su uso personal, ni entrar en contacto con sus fluidos, además se debe mantener relaciones sexuales con protección.
Síntomas: aparición de sarpullido y de manchas que se convierten en pápulas, este líquido es altamente infectante; también se puede presentar tos, dolor de cabeza y muscular.
En caso de presentar alguno de estos síntomas, la personas debe acudir al centro de salud u hospital más cercano, para ser evaluados, pues puede confundirse con otra enfermedad eruptiva, como la varicela y el sarampión.
