El panorama del 2025

El panorama económico del Ecuador en el segundo trimestre de 2024 muestra una contracción del Producto Interno Bruto (PIB) del 2,2 % en comparación con el mismo periodo de 2023, impulsada por reducciones en la inversión, el consumo de los hogares y el gasto gubernamental. La contracción del sector de la construcción, la menor demanda de bienes de capital y la caída del gasto público reflejan un debilitamiento interno, aunque las exportaciones, con un crecimiento del 1,9 %, ofrecen un aporte positivo.

Para 2025, el país enfrentará desafíos y oportunidades. La baja inversión en infraestructura y la limitada diversificación productiva podrían ralentizar la recuperación de sectores como la construcción. La lenta reactivación del consumo de los hogares, afectada por la demanda reducida de bienes y servicios esenciales, podría mantener un ritmo de recuperación moderado. Además, la incertidumbre política podría impactar las decisiones de inversión privada y extranjera.

El sector financiero jugará un rol clave en la economía. La contracción económica en 2024 afectó la colocación de créditos en sectores como la construcción y el consumo, limitando el crecimiento de los ingresos financieros. No obstante, la digitalización y la creciente demanda de servicios financieros inclusivos presentan oportunidades. Las cooperativas de ahorro y crédito podrían ser fundamentales para la reactivación, especialmente en zonas rurales, apoyando a pequeñas y medianas empresas (PYMES) y agricultores con financiamiento.

La asistencia técnica del Fondo Monetario Internacional (FMI) concluyó con mejoras en indicadores y metodologías estadísticas, lo que podría favorecer decisiones económicas más informadas. Sectores como la pesca, la acuicultura y la manufactura de alimentos muestran resiliencia y potencial para liderar la recuperación. Sin embargo, será crucial que el gobierno implemente estrategias para incentivar la inversión, fortalecer el mercado laboral y fomentar un crecimiento inclusivo. A la vez, deberá equilibrar el manejo fiscal y encontrar mecanismos que impulsen la economía sin comprometer la sostenibilidad de la deuda.

En conclusión, aunque Ecuador enfrenta un entorno económico complicado, existen oportunidades para impulsar un crecimiento más robusto en 2025. La clave estará en superar las limitaciones internas y potenciar las fortalezas del sector externo. Bancos y cooperativas deberán adaptarse para apoyar la recuperación mediante soluciones innovadoras y accesibles, mientras que políticas efectivas podrían marcar la diferencia entre una recuperación lenta y un avance significativo hacia el desarrollo sostenible. (O)

Econ. Bladimir Proaño

Docente universitario con amplia experiencia en el sector bancario, especializado en análisis financiero y economía de empresa. Desarrolla estrategias de financiamiento empresarial y análisis financiero.

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