Este próximo 29 de marzo se cumplirán 30 años del desastre de la Josefina, tiempo en el que desfilaron y desfilan una apreciable cantidad de mentirosos que la RAE los califica como mitómanos. Engaños y más engaños que lo podríamos calificar parangonando con García Márquez como: “mentiras de un engaño anunciado”.
La mitomanía se inicia el 17 de marzo de 2012 cuando Rafael Correa ofrece una vía de 4 carriles: “El Descanso- Paute- Gualaceo”; el 30 de agosto de 2013 se contrata para los correspondientes estudios a entregarse en mayo de 2014, pero no se cumple; el domingo 14 de mayo de 2017 se suceden varios deslizamientos en la Josefina por lo que se forma el “Frente Ciudadano por la vía de 4 carriles” que inicia sus acciones con un plantón en Guangarcucho a donde acude el Viceministro del MTOP a mentir que los estudios se entregarán en 8 meses; el 12 de julio de 2018 en el Auditorio del Municipio de Gualaceo se suscribe un contrato complementario de los estudios a entregarse el 12 de diciembre de 2018, luego se dan 5 nuevos ampliatorios a contratos, terminando todos en mentiras; y lo más preocupante es que el dinero que se disponía no sabemos a dónde se desvió. ¡Qué falacia!
“Las autoridades nos han engañado, nos han mentido, estamos rodeados de una plaga de ineptos, mentirosos, que ahora dicen que se ha ampliado el presupuesto a 100 millones de dólares para la provincia y quieren que les creamos…Azuay se ha convertido en una tierra de nadie…no nos respetan porque no tenemos autoridades que hagan valer nuestros derechos… ¡basta! de jugar con los sueños y esperanza de un pueblo…” Es lo que manifiesta Lina Lucero, presidenta del “Frente Ciudadano 4 carriles” de Gualaceo, en un comunicado dirigido al Gobernador del Azuay y al Subsecretario de MTOP.
La mitomanía, de un brote ha pasado a una epidemia, que está azotando a muchísimas autoridades. Como gualaceños y azuayos estamos padeciendo las consecuencias de estas falsedades con el temor de quedar aislados por un potencial nuevo desastre de la Josefina y por los engaños de autoridades especializadas en engatusar. ¡A GUALACEO SE LO RESPETA! (O)