Colombia, Ecuador, México, República Democrática del Congo, Gabón y Zambia lanzaron este 23 de marzo de 2023 una iniciativa conjunta desde Nueva York por la que se comprometen a restaurar los ríos, lagos y humedales degradadas de sus países antes de 2030.
El «Reto del Agua Dulce», como han bautizado a la iniciativa «tiene como objetivo restaurar 300.000 kilómetros de ríos, el equivalente a más de 7 veces la circunferencia de la Tierra, y 350 millones de hectáreas de humedales, un área más grande que la India, en el horizonte de 2030″.
En un comunicado publicado durante la Conferencia del Agua de la ONU, los países inciden en que los ríos y los lagos constituyen los ecosistemas más degradados del mundo; siendo hogar de distintas especies de peces, que, en muchas ocasiones, son vitales para la seguridad alimentaria de las comunidades de dichas zonas.
Sin dar detalles ni adelantar cifras o plazos, los países aseguran que su iniciativa incluye una «aproximación colaborativa para su implementación, en la que los gobiernos y sus socios concretarán soluciones de agua dulce con pueblos indígenas, comunidades locales y otras partes interesadas».
Más allá de su compromiso, estos estados también llaman a «todos los Gobiernos a comprometerse con objetivos claros (…) para restaurar urgentemente ecosistemas saludables de agua dulce».
«Los ecosistemas saludables de agua dulce son fundamentales para la seguridad hídrica y alimentaria, al tiempo que abordan las crisis climática y de la naturaleza e impulsan el desarrollo sostenible», dijo la subsecretaria para Asuntos Multilaterales y Derechos Humanos de México, Martha Delgado Peralta, citada en el comunicado.
Por su parte, el representante de Zambia en Naciones Unidas, Chola Milambo, expresó el compromiso de su país para garantizar la seguridad hídrica, alimentaria y energética de Zambia con el objetivo de crear «un futuro más resiliente». EFE