El encuentro ‘H2O Cuenca. Comprometidos con el agua’ se constituyó en el espacio para que profesionales y nuevas autoridades locales dialoguen sobre la importancia de este recurso natural. Diario El Mercurio impulsó este evento enmarcado dentro del Día Mundial del Agua, en la Cámara de Industrias de Cuenca, fortaleciendo el pensamiento de este medio de comunicación sobre la protección del líquido vital. Cristian Zamora, Juan Cristóbal Lloret, Patricio Crespo y Gustavo Chacón compartieron sus conocimientos, visiones y resultados de sus investigaciones.
Crear un cinturón verde como protección
Cristian Zamora
Alcalde electo.
Es importante comenzar a visualizar cuáles son las nuevas fuentes de agua pensando en el futuro. Las fuentes de captación en algún momento comenzarán a flaquear y es vital adelantarse.
Es momento de darle un giro diferente a la Comisión de Gestión Ambiental (CGA), entidad encargada de dictar la política pública en materia ambiental, porque no ha cumplido este cometido. Debe ser un ente que piense en ambiente. La propia CGA tiene una ordenanza que ya es caduca.
Asimismo, es fundamental la defensa del ambiente y del agua. Vinculado a ello, se incrementarán las Áreas de Conservación y Uso sustentable (ACUs). La ciudad tiene que este rodeada de un cinturón verde e incluso, agregarlas al Sistema Nacional de áreas protegidas. Se duplicarán las ACUs.
También es primordial cuidar las zonas hídricas no dejando de lado el cuidado de la flora, la fauna y la calidad del aire.
“Hay que buscar nuevas fuentes de agua porque las que tenemos ya comienzan a flaquear… debemos pensar en el futuro”
Otro aspecto clave es disminuir las pérdidas del recuro hídrico en el momento de distribuir agua potable a través de tuberías internas. ¿Cómo lograrlo? Con el uso de tecnología.
Educarse sobre el uso responsable del agua, corresponde a todos y ahí también hay que actuar con el apoyo de los medios de comunicación, por ejemplo.
Otro tópico fundamental es la forestación agresiva con plantas nativas y arborización. Y, finalmente, se retomará el contrato licitatorio para la construcción de la planta de aguas residuales (Guangarcucho), algo que ha estado pendiente por varios años y que le urge a la ciudad. (I)
Tecnología para el manejo del riego
Juan Cristóbal Lloret
Prefecto electo.
Es fundamental preservar el agua para las futuras generaciones. Ahí entra el criterio de sostenibilidad sin agotar los recursos naturales.
Las competencias de la Prefectura, en materia de agua, son planificar, construir, operar y mantener los sistemas de riego. Esas competencias es el reto de la nueva administración. También se sembrará, por lo menos, un millón de árboles y, de manera prioritaria, especies nativas. Esto es algo en lo que coincidimos con el Alcalde electo.
Hay que sembrar en las zonas de recarga hídrica, de tal forma que las riveras de los ríos se conviertan en barreras naturales.
Mejorar los suelos también es clave. Para eso es vital garantizar la calidad del agua y la calidad de aire para mejorar de manera sustancial los suelos. Y con esto, trabajar en el aprovechamiento de las actividades productivas.
Sostenibilidad es aprovechar los recursos para el desarrollo local sin agotarlo… vamos a sembrar plantas nativas para crear barrera naturales
Cuenca no tiene soberanía alimentaria. La mayoría de productos que consumimos viene del norte del país. Esto es lo primero que se debe garantizar. Con el plan de riego, se generará desarrollo en actividades productivas que darán seguridad alimentaria, porque no la hay.
En Azuay existen 197.000 hectáreas de áreas regables con propósitos agrícolas. De estas, solo 15.000 hectáreas constan dentro de sistemas de riego.
Es urgente un sistema de riego con tecnología, esa es la visión. Con eso se puede optimizar el uso del recurso.
Pero hay otro problema. La comercialización. Se puede tener buen riego, buena producción pero si no hay buenos mecanismos de comercialización, no sirve de nada. Se creará un sistema de intermediación a precio justo. (I)
No siempre hay agua de calidad en páramos
Patricio Crespo
Hidrólogo
Cada vez se hace más frecuente tener inundaciones en inverno y sequías en verano. Políticamente eso es complejo de manejar. La cuestión es que cuando se tiene problemas con el invierno y se intenta solucionarlo, llega la sequía y trastoca todos los planes.
El resultado de eso es que siempre se llega a la misma conclusión: Nunca se está preparado.
Desde la Universidad, se tomó la decisión de investigar. Y hay preocupación La calidad del agua lluvia que llega a los páramos es de muy mala calidad por la carga de plomo que produce la ciudad.
Los páramos son un basurero de la ciudad. Eso pasa y hay que aceptarlo. Antes el páramo era un sumidero de carbono. Ahora produce carbono.
También se ha verificado que no hay aguas subterráneas profundas. Eso es una mala noticia, porque no hay reservas de agua.
Debemos conservar el agua, pero sobre todo debemos comprender a los ríos, porque se pueden convertir en nuestros enemigos
Otro resultado es que por muchos años se publicó y se ha sostenido que el agua del páramo es de excelente calidad. Pero nunca se ha tomado datos. Siempre fue una percepción. Con el sistema de monitoreo de calidad de agua, se descubrió que hay sitios donde el agua no es de buena calidad.
Hay sitios que no deben ser usados porque tiene arsénico, que es un elemento cancerígeno.
Por lo tanto, no siempre hay agua de calidad en los páramos.
¿Cuáles son los retos? Saber cómo reaccionan los suelos, controlar la distribución de agua de riego, no hay agua para todos. En el campo también hay que controlar el agua. El campesino no puede regar cuándo quiere, cómo quiere y con la tecnología que quiere. Es urgente sectorizar parcelas.
Es un cambio drástico, pero hay que ponerse a pensar. Falta más investigación e inversión. (I)
Conservar el agua y proteger el suelo
Gustavo Chacón
Profesor PhD
El agua se puede conservar ¿sí o no? Esa pregunta es para entender que está pasando con este recurso natural que se ha visto afectado por el cambio climático con altas temperaturas y por las acciones humanas.
Hay una sobreexplotación de recursos, lo que genera cambios metereológicos que cambian el clima local. Estos cambios climáticos y metereológicos producen precipitaciones y altas temperaturas.
Todo esto refiere que se requieren medidas de adaptación prioritarias a escala país. No existe una estrategia nacional. Se requiere fortalecer la capacidad hídrica para determinar el nivel de vulnerabilidad.
Para los próximos años se espera un incremento del 3 % de lluvias en algunas parte del país. Además, el aumento de 2 o 3 grados celcius entre 2030 y 2040. Cambios drásticos que pueden acelerarse. Para eso se requiere un plan de prevención de riesgos.
Es posible conservar al agua. Su ciclo depende del suelo. No hay posibilidad que exista regulación de agua si no es por el suelo
El 48% del país se ha visto afectado por la erosión o degradación del suelo. El 25% se ve afectado por la sequía. Es urgente controlar el uso de fertilizantes, la implementación de control de plagas y enfermedades.
No se puede dejar de lado la importancia del suelo. De este depende el ciclo del agua. No hay posibilidad de que exista regulación del agua si no es por el suelo. Es un recurso natural que se puede controlar directamente.
Pero es importante que el suelo esté protegido desde el punto de vista legal. Actualmente no existe regulación del mismo. Lo poco que hay, está dirigido al suelo para construir o el lugar donde se habita.
Pero no como un subsistema dedicado a proteger el agua.
El suelo es el filtro de los contaminantes. Además, regula el clima. Si se gestiona bien el suelo, este
puede ayudar a la regulación climática. (I)