La petrolera estatal Petroecuador anunció este viernes que ha suspendido un proceso de contratación para proveer servicios específicos dirigidos a la reactivación de pozos de extracción de crudo que han sido cerrados en la región amazónica del país.
La compañía pública recordó que el año pasado había dado inicio a un proceso de contratación de servicios específicos integrados bajo financiación privada para la reactivación de pozos cerrados y para la captación en ellos de gas asociado a la extracción que pueda ser industrializado.
Petroecuador indicó que, tras un análisis a dichos procesos, se han detectado «inconsistencias sustanciales», por lo que ha tomado la decisión de «declararlos desiertos, en defensa de los intereses institucionales y en beneficio del Estado ecuatoriano».
La estatal comunicó que reabrirá los procesos de licitación «en el menor tiempo posible, para captar nuevas inversiones, en cumplimiento a los establecido en normas y leyes vigentes».
El anuncio de Petroecuador se dio en un momento en que la Asamblea Nacional (Parlamento) revisa un caso de presunto peculado o malversación, en el marco de un juicio político de censura contra el presidente del país, el conservador Guillermo Lasso, que involucra a la naviera pública Flopec y a la operadora privada Amazon Tanquer, en un contrato de transporte de crudo.
Ecuador produce unos 480.000 barriles diarios de petróleo, el 70 % de los cuales los destina a la exportación y el resto para el consumo interno.
La venta internacional de crudo es una de las principales fuentes de financiación y de ingreso de divisas del Estado ecuatoriano. EFE