El trabajo de ser mamá no acaba nunca. Las estadísticas no mienten, las mujeres en Ecuador trabajamos de 16 a 24 horas más a la semana que los hombres, debido a que asumimos más tareas domésticas y de cuidado que nuestros binomios del hogar; a esto se suma el desconocimiento del valor económico de estas tareas, pues se consideran obligatorias y gratuitas.
Hoy que reconocemos a las madres como esas mujeres que todo lo pueden y nada temen, millones de mujeres en el mundo están trabajando, cuidan a hijos propios y ajenos, a enfermos, a adultos mayores, a personas con discapacidades; otras estarán visitando a sus hijos en los lugares menos deseados, y la mayoría de ellas cuestionarán si lo están haciendo bien, o serán cuestionadas por terceros
Debemos dejar de romantizar la maternidad, el sacrificio, esfuerzo, dedicación que hacemos día a día quienes somos madres, tiene un peso y una responsabilidad que se asume natural e instintiva de las mujeres, pero también implica una carga social, en la cual muchas estamos solas.
Si quieres regalar algo lindo a tu mamá, regálale un día de descanso y paz. (O)
mi.cordero@sendas.org.ed