Siembra de árboles, cultivo de plantas comestibles, mingas de limpieza, campañas de reciclaje, charlas y talleres, entre otras, son las actividades que cumplen los alumnos del Programa de Participación Estudiantil del colegio Benigno Malo.
El objetivo es promover la educación ambiental como una herramienta para fomentar valores, que permitan tener un planeta más sostenible, responsable y verde.
“La institución es un edificio patrimonial, sin embargo, hemos podido darle toques de vida con la siembra de plantas ornamentales con las cuales hemos hecho jardines verticales. Tenemos también un huerto, al cual le dan mantenimiento los estudiantes”, indicó Edison Idrovo, docente de Biología.
Idrovo, encargado del proyecto de educación ambiental, indicó que los jóvenes son una pieza fundamental, como líderes de su casa, de su grupo, de sus hogares y de sus barrios para que socialicen la importancia del cuidado ambiental ante las problemáticas del cambio climático, que se traducen en temperaturas más altas, desastres naturales y sequías, entre otros fenómenos.
En un espacio destinado al cultivo, los estudiantes trabajan en jardineras donde han sembrado zanahoria, coliflor, brócoli, zucchini, habas, maíz, rábano. En el patio del plantel hay un recipiente para reciclaje de plásticos y se recicla también cartón.
Estas acciones unen a docentes y jóvenes en un solo propósito: tomar acción para proteger, preservar y mejorar la naturaleza con miras a profundizar la conciencia ecológica, como lo establece el Día Mundial del Medio Ambiente que se conmemora hoy.
Aprendizaje
Marco Guanuche, Docente de Emprendimiento, Historia y Participación en el colegio Benigno Malo, indicó que este proyecto ha tenido éxito, dado que los estudiantes han aprendido sobre siembra, cultivos, cosechas y han probado “el sabor de su trabajo”.
“No ha sido necesario tener un terreno grande para trabajar. Hemos logrado dar continuidad a esta labor y se hará lo mismo con los alumnos que vengan el próximo año (…) lo primordial es incentivar desde los más pequeños y entender que la naturaleza nos da la vida y si perdemos esto qué hacemos, a dónde vamos”, cuestionó.
Con la preocupación creciente por el deterioro del medio ambiente, para Edison Idrovo es imprescindible preservar el ecosistema desde lo más pequeño hasta lo macro.
“Con el cuidado a los seres vivos: personas, animales y naturaleza, automáticamente se está cuidando al ambiente. Asimismo, es importante desde las fábricas y las industrias reducir la contaminación para dejar un planeta más sostenible para las nuevas generaciones”, aseguró.
El Día Mundial del Medio Ambiente pone en la agenda global la concienciación sobre la crisis climática, a la vez que fomenta la protección y restauración del planeta a través de comportamientos sostenibles, gestión ambiental y aplicación de eficiencia energética.
Según datos de la ONU, una actividad más sostenible puede contribuir en la reducción de emisiones de CO2 entre un 40% y un 70 % para 2050. Por lo que transformar las sociedades, con base en el respeto a la naturaleza es clave para mejorar el futuro del planeta. (PNH)-(I)
“Lo más importante es concientizar a los jóvenes, que son los líderes de sus grupos y de sus barrios, para que socialicen el cuidado al ecosistema y heredar un mejor planeta a las nuevas generaciones”.
Edison Idrovo. Docente de Biología del colegio Benigno Malo.
DATOS
- En el colegio Benigno Malo se llevan a cabo charlas, trabajos y proyectos de reciclaje para que se cierre el círculo de aprendizaje.
- Desde la institución educativa, se promueve a tomar acción por el clima y el cuidado de la naturaleza para un futuro sostenible.