El nuevo entrenador del Barcelona ecuatoriano, el uruguayo Luis Diego López, afirmó el viernes en su presentación que ha quedado impresionado con la corpulencia física de sus jugadores, y la comparó con la de los equipos europeos.
Tras dirigir su primer entrenamiento, López indicó que los jugadores tienen suficiente calidad técnica. «Buscaremos fortalecerlo todo en busca de los resultados», señaló.
El uruguayo explicó que las negociaciones para vincularse al club de Guayaquil fueron rápidas, y se facilitaron al tratar con un exfutbolista, en alusión al presidente del club Carlos Alfaro Moreno.
«Sentimos que estamos en un club grande, por lo que nos unimos a Barcelona en forma de un relámpago. Definir nuestra vinculación con un dirigente que también jugó al fútbol facilitó todo», precisó.
Luego dijo que «ha encontrado un gran equipo de jugadores», y que está acá para mejorarlos.
«Afrontaremos un desafió lindo y grande, el primero lo tenemos ahí, a la vuelta de la esquina», dijo sobre el partido de vuelta de la repesca para los octavos de final de la Copa Sudamericana ante Estudiantes de La Plata, al que Barcelona llegará con una ventaja de 2-1.
López llegó este viernes desde Montevideo hasta Guayaquil y de inmediato dirigió el primer entrenamiento, «pues es una oportunidad única». «La procuraremos aprovechar desde el primer partido», indicó.
También resaltó el trabajo encontrado del cuerpo técnico interino comandado por Segundo Castillo, «por lo que serán pocos los cambios para el partido contra Estudiantes, eso es una pequeña ventaja para nuestro trabajo».
El técnico de 48 años comenzó como entrenador en 2013 en las divisiones menores del Cagliari, de Italia, después dirigió al Bologna y al Palermo.
Después regresó a Uruguay para lograr el campeonato con Peñarol, en 2018, y de ahí volvió a Italia para dirigir al Brescia, y en 2022 fue a la Universidad de Chile, del que salió en septiembre pasado. EFE