Marrakech (Marruecos).- La ciudad de Marrakech, en el sur de Marruecos y que fue una de las zonas afectadas hace un mes por un devastador terremoto que causó casi 3.000 muertos, está lista para acoger a partir de mañana y hasta el día 15 la asamblea anual del Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial (BM).
Se espera la participación de 12.000 personas de diferentes partes del mundo en esta importante cita económica. La ministra de Economía marroquí, Nadia Fettah Alaoui, dijo esta semana en un acto organizado en Marrakech que la ciudad «está lista» para acoger el evento.
La ministra añadió que el sitio de «Bab Ighli», que acogerá sobre una superficie que supera 25 hectáreas esta cumbre, fue finalizado el pasado 25 de septiembre y subrayó que su país respetó las fechas acordadas con las dos instituciones financieras internacionales, pese a la situación provocada por el sismo.
«Hemos trabajado duro para garantizar la celebración de la asamblea anual en la fecha prevista, pero hemos dado toda nuestra prioridad a los esfuerzos de asistencia y apoyo a las poblaciones afectadas por el seísmo».
El terremoto golpeó varias provincias montañosas del Atlas pero también afectó la ciudad turística del país magrebí. Estos daños fueron más visibles en la ciudad antigua, en algunas murallas y monumentos históricos.
Este domingo, estos daños son menos visibles, se quitaron los escombros que estaban en varias calles del Mellah (barrio judío) en la medina y varios monumentos históricos, edificios damnificados y algunas murallas fueron cubiertas de andamios, mientras se ven algunos obreros inmersos en las obras de restauración.
La plaza mítica Jemaa Fna ha recuperado su carácter festivo y bullicioso con la presencia de encantadores de serpientes, músicos, filas de carrozas de caballos y continuo movimiento de grupos de turistas. Mientras, varios monumentos históricos emblemáticos de la ciudad como Palacio Bahia ya están abiertos y reciben a turistas.
También se han pavimentado calles y aceras de la ciudad que están bordeadas con césped recién sembrado y palmeras, y se han instalado enormes torres publicitarias en las principales rotondas anunciando esta importante cita económica.
En el recinto de Bab Ighli, donde tuvo lugar la COP22 de 2016 , se ve este domingo un fuerte dispositivo de seguridad y un movimiento continuo de los organizadores y periodistas de diferentes países.
Según una fuente de seguridad, se han movilizado alrededor de 6.500 policías para garantizar la seguridad en este evento
Marrakech registró solo una quincena de los casi 3.000 fallecidos por el seísmo, que se produjeron sobre todo en las montañas del Atlas situadas al sur, donde sus habitantes viven a día de hoy en tiendas de campaña en espera de la reconstrucción de sus casas.
El portavoz del Gobierno marroquí, Mustafa Baitas, dijo el pasado jueves que la celebración de esta cumbre es «un reconocimiento a los avances que ha conseguido Marruecos en las últimas dos décadas» y a «su capacidad de resolver las crisis» relacionada con las consecuencias del sismo.
La directora de Comunicación del FMI, Julie Kozack, indicó recientemente que las dos instituciones internacionales mantuvieron la cita de Marrakech para mostrar su apoyo al país magrebí y recordó que ambos organismos están trabajando de forma estrecha con las autoridades marroquíes para adaptar el encuentro a las actuales circunstancias y cuidando mucho que no afecten a las tareas de reconstrucción. EFE