¡Cataplum!

Así debe haber sonado dentro de la cabeza llena de odio del prófugo demagogo y déspota la derrota sufrida en las recientes elecciones, por una vez más. No hay que olvidar que hace algunas semanas amenazaba con su tremenda venganza personal a los ciudadanos. Pero en la gran mayoría de ecuatorianos el triunfo de Noboa sonó como las campanas de la libertad, como augurio de mejores días o, por lo menos, de que la tremenda amenaza que se cernía sobre la Patria había sido superada. Noboa es un pacificador y confiamos en su preparación universitaria para gobernar con conocimiento y sin improvisación. Él es lo opuesto al prófugo, sujeto violento que ama la confrontación buena o mala y que carece de la preparación necesaria como ya vimos antes.

Noboa con su talante tranquilo y mesurado alienta a una mayoría ciudadana que desea la paz y detesta el odio y la violencia y siembra esperanza de paz y ahuyenta el odio y las venganzas que fueron el centro de la campaña con Correa. Estamos seguros de que el empeño por conseguir la amnistía e impunidad para los que cometieron tantos delitos en contra del Estado va a continuar y utilizará la Asamblea con esta finalidad.

Lo que resulta poco menos que inconcebible es el número alto de votantes que implícitamente votan a favor de que regrese el prófugo sentenciado a prisión y la pandilla de ladrones, y hasta de asesinos ¿No comprenden que se alienta el narcotráfico y la delincuencia organizada, lacras que, como nunca antes, asolan el país y causan tremendos daños a las familias y a la colectividad en general?

No es posible engañarse sobre la amenaza para la paz y estabilidad nacional en caso del triunfo de personas que hubiesen hecho hasta la imposible para permitir el retorno de los prófugos que indudablemente continuarán los negociados y el peculado.

Es indudable que, a pesar de la derrota, el prófugo seguirá azuzando a sus huestes para que traten de conseguir la impunidad que permita volver a la parte de la banda que no puede regresar debido a las sentencias por sus múltiples delitos. La derrota se consumó a pesar del bombardeo de mentiras e infamias que, a través de las redes sociales, lanzó de manera incansable ese nefasto personaje. (O)

CMV

Licenciada en Ciencias de la Información y Comunicación Social y Diplomado en Medio Impresos Experiencia como periodista y editora de suplementos. Es editora digital.

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