La Fiscalía investiga a la Prefectura de Pichincha por el presunto delito de peculado, por pagar un sueldo a una persona que realmente trabajaba para Jorge Glas, cuando estuvo preso.
El jueves 2 de noviembre del 2023, en medio del feriado del Día de los Difuntos y de la Independencia de Cuenca, la Fiscalía General del Estado realizó dos allanamientos, uno a las oficinas de la Prefectura de Pichincha y otro a un domicilio de la ciudad de Guayaquil, todo en el marco de la investigación previa por el delito de peculado que le sigue a la Prefectura esta provincia.
La investigación se inició después de que se hicieron públicos algunos audios en los que Soledad Padilla, exasesora de Jorge Glas, ponía en evidencia que durante más de cuatro años trabajó para el exvicepresidente, quien se encontraba preso, pero su remuneración la pagó la Prefectura de Pichincha.
Si la Fiscalía llega a comprobar que Paola Pabón, prefecta de Pichincha, incurrió en el delito de peculado, podría ser sancionada, según el artículo 178 del Código Orgánico Integral Penal (COIP), con una pena de hasta 13 años de prisión y quedará incapacitada, de por vida, para desempeñar cualquier cargo público.
Al final de las diligencias realizadas el jueves, la Fiscalía informó que levantó indicios electrónicos, en las fotografías se observa varias computadoras, y documentos de la oficina que hasta el 31 de agosto de 2023 ocupó Soledad Padilla.
A través de un comunicado, emitido después de los allanamientos, la Prefectura de Pichincha dejó entrever que la diligencia, efectuada en medio de un feriado nacional, era innecesaria, pues la institución ha colaborado con la Fiscalía desde el pasado 25 de octubre, cuando fue notificada del inicio del proceso, en el que se mostró abierta a colaborar.
“Entregamos las respuestas solicitadas, junto con todos los respaldos en 16 cajas debidamente selladas; a pesar de esto, la Fiscalía y la Policía han allanado las instalaciones de una institución pública hoy, en jueves de feriado nacional. Lamentamos que la institucionalidad de este país siga prestándose para un burdo show mediático y no en la búsqueda de la verdad y la transparencia”, puntualizó la Prefectura.
Según informó previamente la Prefectura de Pichincha, la funcionaria Soledad Beatriz Padilla Morán laboró en la institución entre el 5 de noviembre de 2019 y el 31 de agosto del 2023, en donde ocupó el cargo de directora técnica de apoyo, por el que percibía una remuneración mensual de USD 1.920.
Sin embargo, la propia Soledad Padilla, en uno de los audios que se grabó en conversaciones con Jorge Glas, pone en evidencia que mientras la Prefectura la pagaba este sueldo, ella en realidad trabajaba para el exvicepresidente, quien estaba preso en la cárcel de Cotopaxi, pagando dos sentencias, una de seis años por asociación ilícita, por el caso Odebrecht; y otra de ocho años de prisión por cohecho, por el caso Sobornos.
Tras el retiro de Ferdinan Álvarez, quien sería pareja sentimental de Soledad Padilla, de la coordinación del bloque legislativo de la Revolución Ciudadana, la mujer le llama a Glas y en medio de la discusión le señala que no debe rendirle cuentas de su vida personal, pero le pide disculpas por ausentarse del trabajo por cuatro días, para realizar un viaje al exterior, a lo que el exvicepresidente le aclara: “Usted trabaja para la Prefectura, usted no trabaja para mí”.
“No, todo el mundo sabe que era para usted (que trabajaba), también tengo pruebas de que era para usted, me sacaron hasta un pasquín, tengo pruebas de todo. Tanto lo conozco que me lanza una pastillita: para mí no trabajabas, trabajabas para la Prefectura, hay conversaciones, las llamadas que usted hacía para que me contraten, por favor, Jorge, entre gitanos no nos leemos las cartas”, le señaló Padilla, a lo que Glas le responde resignado: “Está bien”.
Según la denuncia que Padilla le colocó a Jorge Glas, por acoso y violencia psicológica, su función al servicio de Glas, durante el período en que el exvicepresidente estuvo preso, consistía en visitarlo todos los días, llevándole medicinas y comida. Previamente, la exfuncionaria trabajó como su asesora en la Vicepresidencia de la República, por más de 10 años, en los que ocupó cargos directivos, también al mando del exvicepresidente.
Denuncias y ataques mutuos
Después de que se conocieron los audios en los que Jorge Glas discute con su exasesora Soledad Padilla, quien lo acusa de acosarla, de presionarla para tener una relación sentimental que ella no desea y de intimidar a su pareja, el asambleísta Ferdinan Álvarez, ella le denunció por acoso, intimidación y violencia psicológica.
En respuesta, Glas denunció a Padilla por una supuesta extorsión, el exmandatario señaló que su exasesora, junto con el asambleísta Álvarez le pidieron USD 350 mil a cambio de no hacer públicos los audios que ella se grabó discutiendo con el exvicepresidente.
En uno de los audios Glas le pide a Padilla no denunciarlo, se compromete a no volver a hablar de ella, pues le señala que una nueva denuncia pondría en riesgo su libertad.
Tras conocerse las denuncias mutuas, Ferdinan Álvarez se desafilió de la Revolución Ciudadana y se hizo público un audio en el que el expresidente Rafael Correa le pide tranquilizar a su novia, para que no denuncie a Glas.