Esta semana la Coalición de Mujeres de Ecuador demandó a la Corte Constitucional se elimine el delito de aborto, es el segundo proceso por la misma causa que recibe la Corte este año, el primero lo hizo el movimiento Justa Libertad. Las reacciones fundamentalistas no dejan de repetir ideas contradictorias, por un lado sostienen que no es verdad que las mujeres estén encarceladas por abortar y por otro plantean que debemos ir a la cárcel por pecadoras.
A todos los conservadores les recomiendo leer el informe de Human Rights Watch de Ecuador sobre aborto, y pobre de aquel que no sienta dolor luego de leerlo. Abortar está tipificado como delito en art. 149 del COIP, según Surkuna, entre el 2015 y el 2017, luego de reformado el COIP, fueron judicializadas 192 mujeres por abortar, en su gran mayoría menores de 25 años, afros, indígenas y empobrecidas.
El objetivo de un delito es criminalizar una acción, y criminalizar el aborto significa restringir a las mujeres el acceso a salud, a condenar socialmente su vida sexual y reproductiva y efectivamente a privarlas de la libertad y de sus proyectos de vida. No repitamos discursos de odio, en el país 8 de cada 10 personas creen que el aborto no debe ser un delito, esa debe ser la voz que escuchamos. (O)
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