Ecuador cuenta con la primera Farmacopea Herbolaria, una plataforma digital gratuita que compila investigaciones científicas sobre las plantas medicinales del país. Esta iniciativa, desarrollada por cuatro universidades ecuatorianas, fue presentada esta semana en la Escuela Politécnica Nacional
El sitio www.farmacopea.ec alberga 14 investigaciones en español, con resúmenes en quichua e inglés. Aquí se describe la composición química de cada planta, su ubicación geográfica y la dosis adecuada para tratamientos medicinales. Cada monografía ha requerido un año de investigación.
Fabián León, investigador de la Universidad de Cuenca, coordinador del Grupo de Investigación «Plantas Medicinales y Productos Naturales» del Departamento de Biociencias presentó la nueva plataforma.
A decir del investigador, esta herramienta busca organizar, manejar y transferir conocimientos aprovechando la biodiversidad y riqueza cultural del Ecuador. Dejarlo por escrito garantiza la preservación de conocimientos, dado que la transmisión oral puede ser riesgosa porque puede perderse o alterarse.
La Farmacopea Herbolaria ofrece suministrar datos confiables sobre los principios activos de plantas medicinales y su uso racional en la terapéutica. Además, proveer de documentos con preparaciones inocuas y sencillas para ser empleada en diferentes dolencias.
Conocimientos ancestrales
El objetivo es fusionar la ciencia con los conocimientos ancestrales. Por ejemplo, en la plataforma se detallan los beneficios de plantas como la guayusa, que se utiliza en el tratamiento de la diabetes, la inflamación de riñones y los ovarios poliquísticos.
También se menciona el uso del ajenjo para tratar la fiebre y los escalofríos. Esta integración busca no solo validar, sino también promover el uso seguro y eficaz de las plantas medicinales.
Mary Muenala, representante de la Fundación “Kichwa Institute of Science Technology & Humanities” (KISTH), enfatizó la importancia de este proyecto para revitalizar los saberes ancestrales.
«Los ancestros curaban con plantas naturales, pero ahora los jóvenes prácticamente no conocen», afirmó.
La traducción de las monografías al quichua ha sido un punto importante, ya que este idioma es esencial para la preservación de los conocimientos ancestrales.
La Farmacopea Herbolaria permite a las autoridades sanitarias y de salud controlar la calidad de las plantas medicinales y determinar cómo deben ser utilizadas. Además, proporciona un registro genético de las mismas.
En un conversatorio sobre “Salud para los Pueblos Originarios”, León mencionó que este proyecto no solo busca resguardar el conocimiento ancestral, sino también proporcionar opciones de salud accesibles y confiables, en un contexto donde el sistema de salud no siempre cubre todas las necesidades.
“En Hispanoamérica y Latinoamérica todavía tenemos confianza cuando hablamos de productos naturales, de tratamientos naturales, de medicina alternativa (…) mucha gente emplea y se beneficia del concepto de la cosmovisión de salud, gracias a las plantas y los productos naturales”, indicó.
La Farmacopea Herbolaria propone una solución mediante la estandarización y validación científica del uso de plantas medicinales, garantizando su efectividad y seguridad conforme a los criterios de la Organización Mundial de la Salud (OMS). El proyecto tiene el respaldo del Consejo de Universidades Flamencas de Bélgica (VLIR). (PNH)-(I)
DATO
- La iniciativa cuenta con cuatro aliados estratégicos: Escuela Superior Politécnica del Litoral, Universidad de Cuenca, Escuela Politécnica Nacional y Universidad Técnica del Norte.