La masacre perpetrada en un bus de transporte interprovincial nuevamente ha causado conmoción en Ecuador.
Además ha incrementado el miedo de los ciudadanos para movilizarse por las carreteras, especialmente desde la Sierra hacia las provincias costaneras.
La referida masacre ocurrió alrededor de las 20:00 del 18 de julio de 2024, en la vía Puebloviejo-Babahoyo, en la provincia de Los Ríos.
Delincuentes armados con fusiles interceptaron al bus 135 de la cooperativa San Cristóbal.
Los atacantes revisaron todos los asientos y exigieron a los pasajeros alzar la cabeza para poder reconocerlos. Una vez que identificaron a sus víctimas procedieron a disparar.
Hubo cinco muertos, entre ellos cuatro adultos y un niño de apenas cinco años.
Investigaciones tras la masacre
La Policía Nacional inició las primeras investigaciones y descartó que la motivación del ataque haya sido por asalto y robo.
Según testigos, los ahora fallecidos abordaron el bus de transporte interprovincial en la terminal terrestre de Babahoyo.
El bus cubría la ruta Guayaquil – Tulcán. Una de las hipótesis es que, los ciudadanos que murieron, posiblemente pretendían salir del país.
Durante el ataque armado, el conductor del bus resultó herido y fue trasladado a un hospital; se conoce que su estado de salud es estable.
La Federación Nacional de Cooperativas de Transporte Interprovincial de Pasajeros del Ecuador (Fenacotip) expresó su solidaridad ante la masacre.
Además manifestó rechazo y condenó los actos delictivos.
Hay que recordar que, esta semana, los transportistas decidieron suspender el “apagado de motores” o medida como forma de reclamo contra el Gobierno por la inseguridad en las carreteras.
Reacciones de ciudadanos en Azuay
En la provincia del Azuay hay reacciones de ciudadanos ante el reciente hecho y otros casos de violencia que vienen ocurriendo en el país.
Humberto Cordero, exgobernador de la provincia del Azuay, señala que si se consulta a los ciudadanos qué les preocupa, lo primero que responden es: la inseguridad.
“La Prefectura del Azuay y el Municipio de Cuenca han demostrado unión para asumir ciertas competencias viales, pero del Gobierno hay pocas respuestas”, reflexiona.
Detalló que como padre de familia está muy preocupado puesto que una delegación deportiva del Azuay debería participar en juegos nacionales prejuveniles en Quevedo, en la provincia de Los Ríos.
Donde ocurrió la reciente masacre en un bus interprovincial.
Explica que hay temor y buscan la forma de no arriesgarse a enfrentar los peligros que representa el trayecto y la estadía.
Menciona que una de las posibilidades es que la Federación Deportiva del Azuay pida un cambio de sede deportiva. O que se garantice la seguridad de los menores de edad que prevén estar presentes en el encuentro deportivo.
Cordero califica de indignarte que el actual gobernador del Azuay, Santiago Malo y el representante de la Policía Nacional, no hayan asistido este 19 de julio a una reunión planificada con asambleístas en la ciudad de Cuenca para tratar temas de seguridad.
Hubo ausencia de las autoridades que lideran a las instituciones encargadas de la seguridad.
Piden seguridad para vías de Azuay
María Cristina García, presidenta de la Asamblea Ciudadana por la Vialidad del Azuay, también señala que desde la Gobernación del Azuay se debería coordinar acciones efectivas de seguridad.
Recuerda que en Azuay hay asaltos en la vía Cuenca-Molleturo-Naranjal y en la vía Cuenca-Girón-Pasaje, en sectores identificados. Ahora, “la gente tiene miedo de transitar por las vías hacia las vacaciones que todos tiene derecho”, finalizó. (I)