En un mundo dominado por los medios transnacionales, los medios de comunicación locales impresos juegan un papel crucial como formas de resistencia cultural y política. Mientras que los gigantes mediáticos globales imponen narrativas uniformes, comerciales y que responden a los monopolios globales, los medios locales preservan la diversidad informativa, resguardan la identidad comunitaria y ofrecen espacios para voces que de otro modo serían silenciadas.
Sostener estos medios es defender la pluralidad de perspectivas y la proximidad con la realidad cotidiana de las personas. Y esto es lo que ha hecho El Mercurio en estos 100 años de resistencia y continuidad, desde Cuenca para el mundo, conoce las problemáticas de la ciudad, promueve debates locales relevantes y ofrece un contrapeso al poder hegemónico de los grandes conglomerados, que tienden a favorecer los intereses económicos y políticos globales por encima de las necesidades locales.
En un contexto de creciente concentración de la propiedad mediática, apostar por los medios impresos locales es también una lucha por el derecho a una información libre, cercana y plural, que defienda la democracia y la soberanía cultural. Gracias Mercurio por ser este medio para las y los cuencanos. (O)