La Unidad Educativa Paccha (UEP) se ha convertido en un semillero de músicos de banda de pueblo.
Es la única institución, en la ciudad de Cuenca, que cuenta con una banda de pueblo integrada por estudiantes, fomentando la cultura en niños y jóvenes. El establecimiento está ubicado en la parroquia Paccha, tierra de tradiciones.
Heriberto Sárate, docente de la UEP y coordinador de la banda de pueblo, relata que el proyecto de contar con una banda de pueblo estudiantil inició hace 10 años.
El objetivo ha sido fomentar el arte y la cultura en la parroquia Paccha. Califica como muy acertado el proyecto dirigido a los estudiantes.
Explica que los resultados son muy buenos para la población joven de la parroquia. Y es que, niños desde los 7 años ya son parte de este proyecto.
Este año lectivo, la institución busca repotenciar en todos los aspectos a la banda de pueblo estudiantil. Se ha conseguido integrar a más jóvenes para que sean partícipes de la banda.
Han sido necesarios ciertos convenios con instituciones, especialmente privadas, para el apoyo de instrumentos musicales y con lo necesario para contar con un profesor para que ayude en la enseñanza. En este proceso ha sido fundamental el aporte de los padres de familia, explica Sárate.
42 estudiantes en proceso de formación
Actualmente, son 15 los estudiantes que están consolidados en la música y forman parte de la banda de pueblo. Pero, con la reciente integración de alumnos nuevos al proyecto, el grupo está conformado por 42 estudiantes en proceso de formación. Participan hombres y mujeres.
Es primordial el apoyo de la comisión de padres de familia. Se ha conseguido la autogestión para contar con los recursos económicos y elaborar los uniformes de los integrantes del grupo.
Además, arreglar algunos instrumentos musicales que con el paso de los años presentan deficiencias; otros han quedado obsoletos. La finalidad es hacer presentaciones musicales que deleiten a los oídos del público.
Se han planificado actividades con los padres de familia para continuar con la formación de los alumnos.
El coordinador de la banda de pueblo recalca que el objetivo es direccionar a los estudiantes a un espacio de entretenimiento y evitar los problemas sociales como la droga y quizá la delincuencia. “Buscamos inculcar a los jóvenes que su tiempo libre sea dedicado a la música”.
Única institución con banda de pueblo
No es común en una escuela formar a una banda de música. “Somos la única institución que tenemos esta posibilidad de apoyar a los niños en la música. Nuestro contexto nos ayuda.
La parroquia Paccha es muy cultural, donde se han formado grandes músicos que quizá por la edad han dejado de ser parte de la música. Pero las nuevas generaciones se están formando en la institución”, reflexiona Heriberto Sárate.
Los integrantes aprenden a tocar los instrumentos de percusión y de viento, hasta que se definen con un instrumento musical.
Con la música, los jóvenes son partícipes de festividades.
La visión es que, los niños que ahora inician en los próximos dos o tres años sean líderes de la música y cuando se gradúen sea parte de su vida y tengan un sustento económico para ellos y su familia.
El estudiante Daniel Chasi, de 16 años, recuerda que inició sus primeros pasos aprendiendo a dominar un instrumento musical cuando tenía 9 años. Actualmente, domina el clarinete y es integrante de la banda de pueblo de la UEP, además es parte de otras bandas musicales que asisten a eventos.
Recuerda a sus primeros profesores de música de la unidad educativa Paccha, refiere al exdirector de la banda llamado Roberto Plaza, además al profesor Víctor Criollo, quienes han sido los formadores.
Ahora, Daniel intenta enseñar a su hermano para que también sea clarinetista.
Apoyo desde el voluntariado
María Fernanda Sari, rectora de la Unidad Educativa Paccha, señala que la banda de pueblo de la institución es muy talentosa y ha puesto en alto el nombre de Paccha.
La música es una oportunidad para los estudiantes. Muchos integrantes de la banda de pueblo se han formado desde pequeños en la música.
La banda musical está integrada con estudiantes desde el nivel de básica media y de bachillerato. Lo que buscamos es que el proyecto se mantenga, explica la rectora. Y es que, no existe otra institución educativa de Cuenca que tenga una banda de pueblo.
El apoyo a los estudiantes viene desde el voluntariado, especialmente de los padres de familia. Pero, sería muy importante que la institución tenga un docente específico para la banda de pueblo o un instructor, explica Sari.
La música es una experiencia enriquecedora, pide a los jóvenes que luchen por sus sueños y habilidades. Que los jóvenes hagan buen uso de su tiempo. En el futuro esto podría significar una profesión para el estudiante. (I)