No es suficiente, no hay como apagar una montaña con un puñado de valientes soldados: bomberos, montañistas, comuneros, no es suficiente… son lugares empinados, de difícil acceso, el aire asfixia y falta, se requiere entrenamiento, no se tiene el equipo necesario, el amor a la montaña, querer salvarla no basta…quienes están en la línea de fuego lloran de impotencia, la vida se les quema en las manos, no es suficiente, ¡no basta!…
Me conmueve ver las imágenes de animales quemados, de la gente que llora, su cansancio, su impotencia, siempre los mismos rostros, es la misma gente: ciudadanos comunes, voluntarios, bomberos, gente que se juega la vida; mientras quienes deciden políticas y lineamientos, pocas veces aparecen… ¿qué pasa con las autoridades, el gobierno, el ejército, los medios de comunicación? ¿Qué pasa con la comunidad internacional? estuvieron aquí mientras la montaña se quemaba, ¿no la vieron?. El lema de la XXIX Cumbre Iberoamericana, dada esos días en Cuenca, fue “Innovación, Inclusión y Sostenibilidad… no es una incongruencia, una locura, ¿Dónde están todos ellos?! ¡¿Qué hicieron?! Pamplinas, bambalinas, lentejuelas de una noche y un montón de mentiras…
Me da la sensación de estar solos, nadie nos ve, no hay quien nos ayude, y sí, quizás no somos los únicos, lo mismo pasa en tantos lugares del mundo: la destrucción de hábitats naturales, la contaminación del agua, del aire, la desaparición de especies se da en el mundo entero, pero la rueda no para, la producción no cesa, dejando por todos lados destrucción y pobreza, ¿cómo no podemos darnos cuenta de que la vida que está en peligro finalmente es la nuestra, de nuestros hijos… ¿qué mundo estamos dejando para ellos, para quienes nos siguen? si el agua se seca, el verde se quema, el aire se envicia, y la tierra se envenena… No es la montaña, los árboles los animales que destruimos lo que lamentamos, es la ambición, la vanidad, y la estupidez de nuestra propia especie, la que se dice “inteligente”…
Me produce impotencia, rabia, tristeza las imágenes de la montaña en llamas, el inocente sufrimiento animal, la gente desesperada, y por otro lado las luces se prenden, la fiesta continua y aquí no ha pasado nada… (O)