Sus seguidores llamaron a la invitación pública que hicieron “Conferencia Magistral” (y vaya que lo era) del año 2007, en ella reveló cosas nuevas y alarmantes a los asistentes que llenaron el local pese a ser el ingreso pagado. Quienes llegaron tarde permanecieron de pie las 2,5 horas que duró y los organizadores estaban en aprietos para acomodarlos y a los que no hubo cómo, habilitaron un cuarto adjunto en el que no se veía al orador aunque sí se lo escuchaba.
Habló sobre el aspecto moral sumamente degradado que ha llevado a esta y otras humanidades extintas, al colapso. Sucesos desconocidos a un público que lo oía entre incrédulo y asombrado y algunos espantados, sobre todo en lo referente a la muerte masiva de aproximadamente 2 500 millones de personas que se dará producto de la inconciencia, la intolerancia y la intransigencia humanas, en una guerra nuclear y prácticamente de exterminio de la que surgirá un nuevo dominador con su grupo. Al menos un hemisferio terrestre quedará contaminado y quienes sobrevivan no tendrán a donde ir ni siquiera mirar, y cabe exagerar, ni esperanza. Cuándo se iniciará, durará, y por supuesto acabará, quienes sobrevivirán, triunfarán, perderán, países involucrados.
Este ser de luz, cuyo nombre es Hi-Shing, desencarnó (murió) curiosamente un domingo de gloria de hace 3 años, pero su mensaje queda para las personas que lo escucharon y aprendieron y para que transmitan sus palabras. Mucha gente dice y está segura de que los hechos pasarán y nada cambiará, que seres extraterrestres o de algún lado o algo así vendrán a salvarnos de esto que nos hemos buscado. No será y deberemos cargar con las culpas y las consecuencias de este hueco que hemos cavado y en el que nos enterraremos para volver a surgir.
Inteligencia Alemana, concordante con esto y de acuerdo al periódico más serio de Berlín, en su edición de mediados de 2024, en un informe reservado, concluía que una gran guerra atroz, que involucraría a muchos países occidentales, se daría en el 2025. Cerca, cerca. (O)
