La construcción sostenible ha pasado de ser una tendencia a una necesidad ante los desafíos del cambio climático. Cada vez más, arquitectos, ingenieros y desarrolladores buscan soluciones que reduzcan el impacto ambiental sin sacrificar funcionalidad, diseño ni eficiencia. En este contexto, el reciclaje de materiales juega un papel fundamental, y la madera reciclada se destaca como uno de los recursos más valiosos para transformar la industria.
La madera reciclada es una estrategia clave y sostenible a diferencia de otros materiales que requieren altos niveles de energía y emiten grandes cantidades de CO₂, la madera sigue un ciclo natural virtuoso. Su uso en la construcción no solo promueve la economía circular, sino que también contribuye a reducir la huella de carbono del sector de la construcción; responsable del 39 % de las emisiones globales de CO₂, según el World Green Building Council. En el Día Mundial del Reciclaje, celebrado cada 17 de mayo, es importante destacar estos beneficios.
Algunas empresas en el país, como Novopan del Ecuador, están marcando el camino hacia una producción más sostenible. A través de la recuperación y transformación de subproductos madereros, estas iniciativas no solo contribuyen a la reducción de residuos, sino que también permiten el desarrollo de materiales de alta calidad, como paneles con eficiencia energética y bajo impacto ambiental. Este tipo de prácticas consolida a la madera reciclada como una de las soluciones más prometedoras para la arquitectura del futuro.
¿Qué beneficios ofrece el uso de madera reciclada?
Este material no solo permite dar una segunda vida a los residuos madereros, reduciendo la presión sobre los bosques naturales, sino que también contribuye a disminuir la huella de carbono de los procesos productivos. A continuación, algunas de las ventajas más destacadas:
- Bajo impacto de carbono: evita emisiones en su producción y promueve un balance más limpio durante todo el ciclo de vida del edificio.
- Estética y versatilidad: los paneles reciclados pueden adaptarse a múltiples acabados, texturas y diseños.
- Alto rendimiento térmico: contribuyen al aislamiento de los espacios, reduciendo la necesidad de climatización artificial.
- Economía circular: fomenta un modelo donde los materiales tienen múltiples vidas y los residuos se transforman en oportunidades.
- Innovación con propósito: la tecnología aplicada en este tipo de madera permite crear productos de alta calidad que cumplen con exigentes estándares de durabilidad.
Madera reciclada: eficiencia con sentido ambiental
La madera reciclada proviene de residuos de otras industrias madereras como aserrín, curros, láminas o retazos de madera que, en lugar de ser descartados o incinerados, vuelven a integrarse a la cadena de valor. Empresas como Novopan han perfeccionado este proceso hasta convertirlo en uno de sus pilares de sostenibilidad.
En su planta industrial ubicada en Pifo (Quito), el 40 % de la materia prima utilizada proviene del reciclaje. Esto no solo reduce significativamente la cantidad de subproductos que irían a rellenos sanitarios, sino que también evita la emisión de gases de efecto invernadero que se generan en los procesos de descomposición o quema de madera no aprovechada. Además, la empresa recicla mensualmente más de 7.500 toneladas secas de estos subproductos. Es decir, transforma lo que otros ven como residuos en tableros decorativos y estructurales de calidad certificada, listos para ser parte de proyectos arquitectónicos innovadores y responsables.
“Creemos que no se trata solo de transformar madera, sino de transformar mentalidades. Nuestra visión es que cada metro cúbico de tablero reciclado sea también una herramienta educativa, que inspire a los nuevos líderes del sector a tomar decisiones responsables y sostenibles”, afirma Jorge Almeida, jefe de preparación de madera de Novopan.
En el marco del Día Mundial del Reciclaje, es primordial adoptar materiales reciclados como la madera no solo como una elección ética, sino como una decisión estratégica que aporta valor a todos los actores: desde arquitectos y constructores hasta usuarios y comunidades.
