“Jamás hemos destruido absolutamente nada, tenemos documentado, más bien hemos actuado con responsabilidad”. Así el alcalde Raúl Delgado, principal accionista del parque temático Jurassic Paute, responde a la denuncia por daño a sitio arqueológico presentada por la Prefectura del Azuay.
Según Delgado, contrató un estudio de prospección arqueológica, previo a la construcción del proyecto con la autorización del Instituto Nacional de Patrimonio Cultural (INPC). En el estudio se determinó que se puede intervenir porque no se identificó material arqueológico significante en el área del parque ubicado en el polígono Pirincay.
“Si de haber existido algo arqueológico lo más tonto hubiese sido haberlo destruido”, asegura el burgomaestre, quien cree que la denuncia es una retaliación política del prefecto Juan Cristóbal Lloret por oponerse a su forma de administrar el Azuay.
El polígono arqueológico Pirincay fue destruido con el transcurso de los años por intervenciones de los mismos pobladores del sector. Todo esto se demuestra porque la zona está habitada, tiene negocios, una estación de gasolina e invernaderos funcionan dentro del mismo.
Además, dijo que para emplazar Jurassic Paute no se hicieron construcciones, lo que se realizaron son senderos para ubicar a los animatronixs.
El alcalde espera ser notificado de la denuncia por las autoridades competentes, así presentar toda la documentación y demostrar que no se ha cometido ningún delito.
Igualmente, cree que si el INPC cuestiona este proyecto es por la presión mediática que tuvo a raíz de la presión del prefecto Lloret. -(I)
DETALLE
– Según Raúl Delgado, él y dos personas más son propietarias del predio donde se emplazó el parque temático.
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