Decenas de personas se dieron cita en el Centro Histórico para disfrutar de la primera “Cabalgata de Reyes”, un desfile colorido y tradicional, que buscó rescatar las tradiciones ancestrales del pueblo cuencano, fomentar la paz y unión, y dinamizar el turismo con una manifestación cultural propia de esta época.
La cabalgata, una propuesta acogida por el Ministerio de Turismo de Ecuador, inició con la participación de la banda de músicos de la Policía Nacional en el Parque San Sebastián. A lo largo de la calle Mariscal Sucre, desfilaron los Tres Reyes Magos: Melchor, Gaspar, Baltasar, montados en caballos, de igual forma lo hicieron las reinas de la ciudad. El Ángel de la Estrella y su cortejo de niños revestidos de ángeles y pastores los acompañaban.
Más de diez caballos con jinetes, que lucían ponchos y sombreros de paja toquilla, eran la atracción para los presentes. Durante la cabalgata llovió; sin embargo, no fue impedimento para que la gente siga disfrutando del acto.
Las personas con paraguas en manos se concentraron en el Parque Calderón, en donde estaba la escenificación del nacimiento del niño Jesús. Ahí, se reunieron los Tres Reyes Magos, y uno de ellos difundió un mensaje de paz, concordia y unidad para todos los presentes.
El alcalde Pedro Palacios también estuvo presente en el desfile y dio unas palabras al público sobre la importancia de la paz y tolerancia.
“Que en cada uno de nuestros corazones tengamos no solamente la paz sino también la tolerancia, la tranquilidad, la posibilidad de tener empatía (…) la posibilidad de saber que somos libres de pensamientos y opinión, pero que al final del día esa paz, esa posibilidad de ser libres también nos haga más hermanos, más seres humanos, más tolerantes unos con otros”, señaló Palacios. (BMM) (E)
