Hasta fin de mes la Unidad Ejecutora del Proyecto Tranvía espera tener listo un informe sobre las pruebas del tranvía, que se ejecutan desde el 2 de enero y han tenido como principal problema los fallos técnicos en el sistema de alimentación por suelo (APS).
Así lo explicó Carolina Ormaza, directora del proyecto, quien aclaró que si bien este es uno de los puntos más vulnerables del sistema, el mantenimiento se realiza de inmediato y se espera superar los inconvenientes cuanto antes.
El sistema de alimentación por suelo consiste en la tercera línea de las rieles del tranvía en el Centro Histórico, de color blanco por la cerámica que usa como aislante. Dicho elemento dota de electricidad al tranvía a través del piso y evita la instalación de cables en zonas patrimoniales.
“La verificación técnica se cierra este mes y se emitirá un informe”, indicó Ormaza, quien acotó que en caso de que este sea favorable se pasará a la siguiente fase de pruebas que consiste en la habilitación de los conductores que requieren horas de práctica.
Las pruebas continuarán hasta el segundo semestre del año, cuando se espera que el tranvía opere comercialmente, dijo la funcionaria. (JMM)-(I)
