La Organización Mundial de la Salud (OMS) anunció hoy que el coronavirus (COVID-19) ya puede definirse como una «pandemia», después de que en las últimas dos semanas el número de casos fuera de China se multiplicase por 13 y el de países afectados se triplicase.
«La OMS estima que el COVID-19 puede ser caracterizado como una pandemia», declaró el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, tras subrayar que hay más de 118.000 casos de coronavirus en 114 países y que el número de muertes es de 4.291.
«Podemos esperar que el número de casos, de decesos y de países afectados aumente todavía más» en los próximos días y semanas, señaló, y agregó que la OMS «está profundamente preocupada por la alarmante expansión del virus, por su gravedad y por los niveles de inacción».
El máximo responsable del organismo aseguró que la nueva definición del COVID-19 como pandemia «no cambiará lo que estamos haciendo y lo que los países deben hacer», en relación a que las estrategias deben seguir enfocadas más en la contención (para evitar nuevos casos) que en la mitigación de los ya existentes.
«Esta pandemia no es sólo una crisis de salud pública, afecta a todos los sectores, y todos los gobiernos y sociedades deben involucrarse en la lucha», afirmó el médico etíope.
Según el director de la OMS para Emergencias Sanitarias, Mike Ryan, considerar el coronavirus una pandemia fue una decisión tomada tras largas horas de estudio con expertos dentro y fuera del organismo, y «debe impulsar a tomar acciones más agresivas e intensas».
En la parte positiva, Tedros recordó hoy que dos de los países más afectados por la pandemia, China y Corea del Sur, muestran una clara tendencia a la baja en el número de casos, y que 57 de las naciones afectadas han reportado menos de 10 contagios.
Añadió que la OMS agradece a países como China, Irán, Italia y Corea del Sur las agresivas medidas para contener sus brotes epidémicos, reconociendo que «sus sociedades y economías han pagado un duro precio».
En este sentido, recordó, «todos los países deben buscar un buen equilibrio entre proteger la salud, minimizar los efectos adversos en la economía y la sociedad y respetar los derechos humanos».
Ryan vaticinó por su parte que otros países estarán pronto sufriendo la situación actual que viven naciones como Italia o Irán, y reconoció que los distintos gobiernos, incluso la propia OMS, «podrían haber hecho algunas cosas mejor, pero no es el momento de las culpas, sino de solidarizarse y poner manos a la obra».
Recordó a los países más preocupados por atender los casos cuando surjan que en prevenir la llegada del brote que «si no se intenta reprimir el virus, éste puede saturar sus sistemas sanitarios», por lo que recomendó mayores esfuerzos en la búsqueda y diagnóstico de contagios.
La anterior pandemia declarada por la OMS tuvo lugar en 2009 y fue por la gripe A (que según estudios médicos causó entre 150.000 y 575.000 muertos).
Esta es la primera vez que una epidemia causada por un coronavirus es considerada como tal. EFE