Al menos cinco miembros de las fuerzas de seguridad afganas murieron y otros siete resultaron heridos en un atentado talibán con un camión cargado de explosivos en Afganistán, en el primer ataque de este tipo desde la firma el pasado 29 de febrero del acuerdo en Doha entre los insurgentes y Estados Unidos.
El atentado contra un puesto de las fuerzas de seguridad ocurrió cerca de la pasada medianoche en el distrito de Nahr-e-Sara, en la provincia meridional de Helmand, informó este lunes el Ministerio de Defensa en un comunicado.
Según la nota, el ataque lo llevó a cabo un insurgente suicida que iba al volante del camión cargado de explosivos.
«En esta potente explosión murieron cinco miembros de las fuerzas de seguridad y otros siete resultaron heridos. El puesto avanzado resultó parcialmente dañado», explicó por su parte a Efe el portavoz del gobernador de Helmand, Omar Zwak.
El portavoz anotó que el Ejército y los servicios de inteligencia compartían el puesto atacado.
Los talibanes, que en las últimas semanas habían negado o guardado silencio sobre la mayoría de los ataques, reivindicaron, sin embargo, este atentando.
El portavoz talibán Qari Yusuf Ahmadi señaló en un comunicado que el puesto de control fue «completamente destruido» y dejó «decenas de enemigos (…) muertos o heridos».
Ahmadi justificó el primer atentado con un camión cargado de explosivos desde la firma del acuerdo con EEUU como respuesta por las «repetidas violaciones del enemigo», en referencia a ataques de las fuerzas de seguridad afganas.
Tanto talibanes, como el Gobierno afgano y las tropas estadounidenses desplegadas en Afganistán se han culpado durante las últimas semanas de violar en parte el acuerdo de Doha, sobre todo en lo que se refiere a la reducción de la violencia.
Mientras talibanes afirman que sus acciones son menores y en su mayor parte en zonas rurales lejos de las ciudades, las tropas estadounidenses y el Gobierno afgano señalan que sus operaciones nunca son ofensivas, sino de defensa frente a ataques insurgentes. EFE