OPINIÓN|
Es el nombre de la charla de alto nivel organizada por la Comisión Interamericana de Mujeres de la Organización de Estados Americanos. Ni el gobierno ni las decisiones en política deberían ser cuestión de género, menos aún que el hecho de ser mujer nos ponga en mayor grado de vulnerabilidad ante la pandemia; pero lo es, las cifras lo dicen.
Los efectos socioeconómicos son más graves para las mujeres que trabajaban en mayor cantidad que los hombres en el sector industrial. El cuidado en el hogar está en mayor medida a cargo de mujeres, con el agravante de que no es remunerado. La pandemia impacta más a las mujeres que sufren varios tipos de violencia porque se ven obligadas a quedarse en casa con el violentador. La mayoría de trabajadores en la primera línea de salud, es decir enfermería son mujeres.
Del otro lado de la historia, según datos de la Universidad Johns Hopkins, 7 países liderados por mujeres han demostrado mejor gestión durante la crisis porque muestran más bajo número de fallecidos; son Dinamarca, Islandia, Finlandia, Alemania, Nueva Zelanda, Noruega y Taiwán. El liderazgo femenino nos deja un gran aprendizaje y un ejemplo a seguir. (O)