Ecuador registra hasta este lunes 4.246 fallecidos oficiales, 2.860 probables y 50.915 positivos por COVID-19, informó el Ministerio de Salud Pública.
Desde que se reportara el primer caso el pasado 29 de febrero se han tomado en total 139.741 muestras en el país andino, entre PCR y pruebas rápidas, gracias a las cuales se han descartado 70.413 casos.
Los datos por provincias, que se basan únicamente en los test PCR, indican que el Guayas sigue liderando la lista al registrar 14.804 contagiados y 1.543 fallecidos, seguida de la andina de Pichincha, cuya capital es Quito, con 6.172 positivos y 455 decesos.
A esas provincias les siguen en orden Manabí con 3.762 casos, Los Ríos con 2.075, El Oro que reúne 1.803 contagios, Esmeraldas con 1.756, Santo Domingo de los Téschilas con 1.708 positivos y Azuay con 1.424 mientras que el resto de provincias tiene menos de 1.000 casos cada una.
De acuerdo al parte oficial diario que difunden las autoridades, 20.577 contagiados están estables en aislamiento domiciliario y 485 hospitalizados en condición estable, mientras que 291 se encuentran ingresados bajo pronóstico reservado.
Además 5.120 pacientes se han recuperado, 6.384 recibieron el alta hospitalaria y 13.812 fueron dados de alta epidemiológica.
A nivel nacional, el grupo etario más afectado es el de 20 a 49 años, que aglutina el 57,5 % de los casos, seguido por el de 50 a 64 años, que suma el 22,8 %, y el de mayores de 65, con el 15,8 % de confirmados.
Ecuador se encuentra en un proceso de cambio de fase de la estrategia epidemiológica para encarar la pandemia del COVID-19 y busca pasar del aislamiento masivo al distanciamiento social, con el levantamiento paulatino y coordinado de las restricciones en vigor desde el pasado 16 de marzo.
La capital ecuatoriana pasará a una nueva fase de desescalada, al haber recibido luz verde por parte del Comité de Operaciones Especiales para cambiar al color amarillo en el semáforo epidemiológico a partir del próximo miércoles, con el que se levantarán algunas restricciones.