OPINIÓN|
¿Y ahora?, ¿sobre qué escribo? Estoy desolada, ¡ay país, país país…!, como dice Piero o preguntaré ¿de qué se ríe señor ministro? como lo hace Benedetti en la voz de Soledad Bravo, o más bien aceptemos, de una vez, que somos el país de los pendejos de Facundo Cabral que “al ser mayoría, eligen hasta el presidente” y más ahora cuando aparece el más peligroso de todos, “el pendejo demagogo que cree que el pueblo es pendejo”. Y entonces, ¿será de escribir sobre el miserable juego de tronos al que estamos asistiendo?, o ¿sobre los “préstamos” de movimientos y partidos a personajes con procesos judiciales?, o más bien ¿sobre los retrasos, contradicciones y ambigüedades de las acciones del CNE y de los gravísimos informes de Contraloría? ¡Ay país, país…! ¡Qué dirá el Santo Padre que vive en Roma…!, como canta Violeta Parra, le están degollando a sus palomas y, encima más, destruyendo “la Casa de Todos”, el Gobierno de Moreno es coautor, cómplice y encubridor del etnocidio y el ecocidio que está sucediendo en la Amazonía y de la entrega del país a las empresas mineras y petroleras, bajo la pusilánime mirada de las autoridades locales. (O)
