Nicaragua recibió este domingo 200.000 vacunas contra la covid-19, específicamente la Covishield, producida por la farmacéutica AstraZeneca, donadas por el Gobierno de la India, y que beneficiará a 100.000 nicaragüenses.
El lote de vacunas, que permitirá dar continuidad al programa nacional de vacunación contra la covid-19 que se desarrolla en Nicaragua, fue recibido por Martha Reyes y Carlos Sáenz, ministra y secretario general del Ministerio de Salud, respectivamente.
«Nuestro Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional y nuestro pueblo agradece como, lo dice esta gráfica, el regalo del pueblo y Gobierno de la India», señaló la ministra nicaragüense, durante el acto, al que solo tuvieron acceso medios oficiales, sandinistas y progubernamentales.
La funcionaria destacó que esas vacunas serán aplicadas a la población más vulnerable de Nicaragua y permitirán fortalecer el plan de respuesta a la transmisión de la covid-19.
Desde el 2 de marzo pasado «ya estamos vacunando a personas con enfermedades renales, cardiópatas, cáncer y posteriormente se continuará con el resto de las personas que presentan enfermedades crónicas de base, como hipertensión, diabéticos de acuerdo a la edad», explicó Reyes.
Luego, dijo, continuarán con el «personal de salud de primera línea, que están de cara a la atención y personal de otras instituciones que también están de cara a la atención».
Las vacunas de India fueron elaboradas por el laboratorio AstraZeneca, y se suman a las 135.000 dosis de la misma firma que llegarán próximamente a Nicaragua gracias al mecanismo Covax, que garantiza el acceso de medicamentos a países pobres, de acuerdo con las autoridades nicaragüenses.
Esas 335.000 dosis, más una cantidad no específica de la vacuna Sputnik V donadas por Rusia que ya se encuentra en el país, servirán para que las autoridades locales programen la campaña de vacunación.
Según el Ejecutivo, durante todo 2021 Nicaragua recibirá más de 2,6 millones de dosis contra la covid-19 por medio del mecanismo Covax, y otros 3,8 millones de dosis de la vacuna Sputnik V, que según médicos locales servirían para inmunizar al 48 % de la población.
Las autoridades nicaragüenses han mostrado su interés en vacunar a los 6,5 millones de habitantes en un tiempo no definido, con fórmulas de distintos proveedores.
Según los registros del Ministerio de Salud, la pandemia ha dejado 174 muertos y 6.509 casos confirmados, según datos oficiales.
Los datos oficiales contrastan con los del independiente Observatorio Ciudadano COVID-19, que reporta 2.997 fallecimientos por neumonía y otros síntomas relacionados con el nuevo coronavirus, así como 13.209 casos sospechosos, ni con los de un estudio del Comité Científico Multidisciplinario, que contó al entre 7.600 y 8.500 defunciones hasta agosto pasado.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Oficina de la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para Derechos Humanos (Acnudh) han mostrado su preocupación por Nicaragua, donde las autoridades no imponen restricciones para evitar la expansión de la covid-19, toman pocas medidas de prevención social, y fomentan actividades de aglomeración.