Esta tecnología, cuyo funcionamiento se describe en un artículo en la revista Med (del grupo Cell), puede detectar además otros virus como el de la gripe y, gracias a su tamaño y fácil portabilidad, podría utilizarse para la detección rápida de virus en escuelas, aeropuertos o puertos marítimos, afirman sus responsables.
«Se trata de un método de detección y vigilancia que no requiere una infraestructura costosa como otros enfoques», asegura Juan Carlos Izpisúa Belmonte, coautor del artículo e investigador del Laboratorio de Expresión Genética del Instituto Salk (California).
Con esta prueba portátil -denominada Nirvana- se logra lo mismo que con dos o tres distintas, aseguran los autores de este estudio, firmado también por la Universidad Católica San Antonio de Murcia (sureste de España).
En la actualidad, el método estándar para detectar covid-19 es la PCR, sin embargo, si da negativo, los pacientes y médicos no obtienen información sobre lo que podría estar causando los síntomas similares a los del coronavirus, a menos que realicen otras pruebas para detectar otros virus, relata un comunicado del Instituto Salk.
Y si la muestra es positiva, no se sabe con qué variante está infectado el paciente, a menos que se realicen otras pruebas.
Para ofrecer una solución, Mo Li, ahora en la Universidad de Ciencia y Tecnología Rey Abdullah de Arabia Saudí y antes en el laboratorio de Izpisúa, se preguntó si el método de detección y secuenciación de genes RPA (amplificación de la polimerasa recombinasa) podría ser más útil, más rápido y barato, además de portátil, que el método actual de análisis de la covid-19.
«Rápidamente nos dimos cuenta de que podíamos utilizar esta técnica no solo para detectar el SARS-CoV-2, sino también otros virus al mismo tiempo», asegura Li, quien se asoció con Izpisúa para demostrarlo.
Así, en el nuevo artículo, se describe un dispositivo pequeño y portátil que puede analizar 96 muestras al mismo tiempo utilizando RPA; la prueba puede analizar simultáneamente muestras de covid-19, gripe A, adenovirus humano y coronavirus que no son SARS-CoV-2.
Los investigadores probaron Nirvana en 10 muestras que se sabía que eran positivo para el SARS-CoV-2, en 60 muestras de estado desconocido (para este coronavirus) y en muestras de aguas residuales municipales que albergan el SARS-CoV-2, entre otras.
En todos los casos, el ensayo fue capaz de identificar correctamente qué virus estaba presente y los datos de la secuenciación también permitieron acotar el origen del SARS-CoV-2 en las muestras positivas, diferenciando las variantes de China y Europa, por ejemplo.
«El diseño de este análisis es realmente flexible, por lo que no se limita a los ejemplos que hemos mostrado», afirma Li. «Podemos adaptarlo fácilmente para abordar otro patógeno, incluso algo nuevo y emergente».
En 15 minutos, el dispositivo empieza a dar resultados positivos o negativos, y en tres horas finaliza el análisis de las 96 muestras, incluidas las secuencias de cinco regiones del SARS-CoV-2 que son especialmente propensas a acumular mutaciones que dan lugar a nuevas variantes.
Nirvana (iniciales en inglés de Nanopore Sequencing of Isothermal Rapid Viral Amplification for Near Real time Analysis) necesita, entre otros, de un ordenador portátil, un bloque de calor y pipetas.
Izpisúa detalla a Efe que esta proporciona «una solución prometedora» a los desafíos actuales de pruebas amplias y rápidas, y conocer las variantes. El estudio ofrece «una prueba de principio» de una solución integrada para la detección rápida.
«Aunque obviamente se puede optimizar mucho más, y conceptualmente en el laboratorio académico lo podemos hacer muy rápidamente, su traslado a la clínica diaria depende del interés público o privado en comercializarlo», concluye Izpisúa. EFE