La economía ecuatoriana en el primer trimestre del 2021 cayó en 5,6%, comparándola con el mismo período del 2021, según el informe que ayer presentó el Banco Central del Ecuador (BCE). Sin embargo, Guillermo Avellán, gerente de la institución, afirmó que el pronóstico era aún más desalentador y resaltó que, en comparación con el último trimestre del año pasado, ya existe una ligera recuperación del 0,7%.
“Los resultados interanuales todavía reflejan una contracción de la economía, debido a la propagación del coronavirus los primeros tres meses del año. Por otro lado, el crecimiento que podemos ver respecto al primer trimestre, en relación con el último trimestre del 2020, refleja una ligera recuperación en el aumento del consumo de hogares y la inversión, estos dos componentes serán fundamentales para la recuperación de la economía ecuatoriana”, afirmó Avellán.
Según los pronósticos del BCE, el Precio Interno Bruto (PIB) del Ecuador caería en el primer trimestre del año en un 6%, por lo que Avellán recalcó que, aunque las dificultades económicas continúan, al país le fue mejor de lo esperado.
“Se tenía una visión negativa en términos interanuales del primer trimestre, en la medida de que fue terminando, vimos que, pese a que la propagación del virus fue bastante fuerte, sobre todo en Quito, y que las restricciones a la movilidad impuestas por el anterior Gobierno también afectaron, de una manera bajaron y pudimos ver que la contracción en términos interanuales no llegó al 6%, lo cual, a pesar de que es un número negativo, inicialmente se pensó que podía ser peor”, puntualizó el gerente del BCE.
Los sectores de la economía que no han logrado despuntar y son la principal causa del decrecimiento del país, son la disminución del consumo del Gobierno en -8,5%, la inversión cayó en -6,3% y consumo de los hogares bajó en -3%. Únicamente las importaciones mostraron un incremento del 2%.
Además, las exportaciones petroleras bajaron en -1,9% comparado con el cuarto trimestre del año anterior, como consecuencia de la disminución en la extracción del crudo.
Como una tendencia que se ha marcado desde el inicio de la pandemia de la covid-19, los sectores no petroleros son los que han mantenido a flote a la economía del país, es así como la pesca y la acuacultura tuvieron un crecimiento histórico de 15,2%, debido al incremento de las exportaciones; la manufactura reportó un crecimiento de 2,4%; la agricultura creció 2,2% respaldada en el desempeño positivo de los cultivos de banano, café, cacao y flores.
Incluso el sector del alojamiento y servicios de comida, que ha sido uno de los más golpeados por la pandemia, comenzó a recuperarse y ya registra un crecimiento del 3,1% por los servicios hoteleros y de restaurantes.
Incertidumbre y pronóstico
Pese a que la economía ecuatoriana sigue en recesión, el gerente del Banco Central del Ecuador (BCE) Guillermo Avellán, confía en que la previsión de crecimiento anual del 2,8 no solo se mantendrá, sino que incluso espera que sea superior, esto dependerá del avance del plan de vacunación, sin lo cual no podrán reactivarse los sectores productivos que siguen contraídos.
Para el experto económico Santiago García, lo sucedido con la economía ecuatoriana en el primer trimestre del 2021 fue producto de la incertidumbre política que el país vivió el país, previo a las elecciones presidenciales, así como al confinamiento parcial decretado para evitar el aumento de casos de covid-19.
Aunque esas etapas se han superado, el analista no es optimista sobre el crecimiento anual y señaló que difícilmente se alcanzará el 2,8% previsto e incluso se podría esperar un decrecimiento, si no se avanza en la vacunación.
