Rusia anunció sanciones individuales contra 61 ciudadanos canadienses, desde altos funcionarios a militares, empresarios, expertos y periodistas, en represalia por la política «rusófoba» promovida por el Gobierno de Ottawa.
En lista figura Cameron Ahmad, director de comunicaciones del primer ministro canadiense, Justin Trudeau; su asesor, Jeremy Broadhurst; o el jefe de los servicios de inteligencia, David Vigneault.
Entre los militares a los que se les prohíbe la entrada destaca el general Steve Boivin, comandante de operaciones especiales; el vicealmirante Craig Bainer, comandante en jefe de las Fuerzas Marítimas del Atlántico; y Al Meinzinger, jefe de la Fuerza Aérea de Canadá.
También han sido sancionados Tiff Macklem, presidente del Banco de Canadá; David Walmsley, director del diario «The Globe and Mail»; Michael Melling, director del canal CTV News; o los alcaldes de Ottawa y Toronto, y los dirigentes de varias provincias canadienses.
En breve, según el comunicado del ministerio de Exteriores de Rusia, se conocerán los nombres de los nuevo integrantes de la lista, que responde a la decisión del Gobierno de Canadá de enviar armas y mercenarios a Ucrania.
Además, Moscú advierte a los instructores del Ejército ucraniano y de las unidades nacionalistas que son responsables de los crímenes de guerra cometidos por sus subordinados.
Hace más de una semana, Rusia ya prohibió la entrada a 87 congresistas canadienses en respuesta a la sanción por Ottawa de 160 senadores rusos.
Recientemente, Trudeau acusó al presidente ruso, Vladímir Putin, de ser responsable de crímenes de guerra en Ucrania y que el presidente estadounidense, Joe Biden, está en lo cierto al calificar las acciones del Ejército ruso como genocidio. EFE